Después de más de dos semanas de descanso, la Fórmula Uno regresa a las pistas y la rivalidad entre los compañeros de McLaren, Fernando Alonso y Lewis Hamilton, abre otro capítulo en el Gran Premio de Turquía de este fin de semana.
El Gran Premio de Hungría del 5 de agosto dejó una estela de caos en el seno de McLaren, incluyendo multas para Alonso y la escudería. Hamilton dijo que no le hablaba al español, Alonso se fue rápido de la pista y el inglés sacó ventaja de 80-73 sobre su compañero en el campeonato de pilotos.
Desde entonces, Hamilton estrechó lazos con uno de los dueños de McLaren, Mansour Ojjeh, al pasar tiempo en su yate, mientras que Alonso se fue de vacaciones lejos del equipo.
La relación entre Alonso y Hamilton se deterioró aún más cuando el español fue multado por retrasar a su compañero en los pits en el último minuto de la clasificación del GP húngaro.
Hamilton recibió la pole y ganó la carrera en Budapest, en la que Alonso llegó cuarto. McLaren distribuyó un comunicado en Estambul, pero en el mismo no hay referencia al escándalo de Hungría.
'Siempre es bueno tener un descanso y recargar baterías, pero es fantástico volver a la pista en Turquía. Tengo un buen total de puntos en el campeonato de pilotos, y espero aumentarlo en Estambul', dijo Alonso.
'Es una pista espectacular para manejar, con muchos retos diferentes, y es posible avanzar. El circuito es bastante ancho, lo que siempre ayuda a rebasar'. La carrera es el domingo a 58 vueltas en el circuito de 5,338 kilómetros.
Duelo El inglés Hamilton ya no quiere hablar de Alonso, mañana demostrará su categoría.
