Las autoridades italianas anunciaron que no se permitirá el ingreso de público a los estadios de fútbol que no cumplan la medidas de seguridad.
La decisión de jugar a puertas cerradas fue dada a conocer apenas unos días después de la muerte del policía Filippo Raciti, durante enfrentamientos con hinchas en el partido Catania-Palermo en Sicilia por la Serie A.
El ministro del Interior Giuliano Amato también dijo que los clubes ya no podrán vender paquetes de boletos a hinchas de los equipos visitante.
Sin embargo, la reapertura de los estadios podría darse el próximo fin de semana si el gobierno adopta las medidas de seguridad, manifestó el comisionado de la federación, Luca Pancalli.
Según un informe publicado el lunes el lunes por la Gazzetta dello Sport, apenas cuatro estadios de equipos en la Serie A cumplen con la normativa. Se trata del Estadio Olímpico en Roma, el Artemio Franchi en Siena, el Renzo Palermo en Palermo y el Olímpico de Turín. San Siro, el estadio que comparten Inter y Milan, no satisface los requisitos.
Habla el Papa
El papa Benedicto XVI expresó su “cercanía espiritual” a la familia de Raciti. En un telegrama de condolencias que fue leído en el funeral, el Papa deploró “los actos de violencia que manchan el mundo del fútbol”.