Aquel miércoles 1 de abril de 2009, cuando Honduras venció 3-1 a México con goles de Carlo Costly y Carlos Pavón en el estadio Olímpico, Anthony Lozano, un juvenil de 16 años, de grandes sueños, idealizaba desde muy cerca de la cancha, la posibilidad de jugar ese tipo de partidos.
Ese día, mientras miraba al 'Cocherito' y a la 'Sombra' festejar, olvidó varias veces cumplir a cabalidad su función de recogebalones. “Algún día”, se decía a sí mismo. Para su fortuna, ni el fútbol ni su perseverancia lo han traicionado.
Hoy, seis años después, 'Choco' Lozano está a punto de cumplir otro sueño. No ha resultado fácil, sobre todo en las últimas dos semanas cuando una lesión estuvo a punto de ponerse en el medio. Tampoco su fe ha conspirado contra él. “Estoy bastante mejor”, dice al referirse a su estado físico.
Cuándo piensa en ese partido contra México, ¿qué se le cruza por la mente?
Lejos de ser una presión es una motivación para nosotros. Jugar contra una selección como México, sabiendo lo que representa a nivel de Concacaf. Pero estamos en casa y tenemos que aprovechar al máximo eso: el estadio, la temperatura. Hay muchas cosas a favor.
México es México, pero en Honduras...
En Honduras tiene que respetar a la H. Así como ellos se hacen sentir en su estadio, así nosotros vamos a hacernos sentir en el Olímpico.
¿Qué le dice el uno a uno de Honduras-México?
Cada partido es distinto. Sabemos que tienen grandes jugadores que están jugando a un nivel extraordinario, sin embargo, nosotros también tenemos lo nuestro. Dentro del campo cualquier pensamiento negativo se va, pensamos simplemente en jugar.
En México dicen que en estos momentos no son la potencia del área, ¿para usted ellos lo siguen siendo?
Siempre van a ser una potencia. Ellos se quieren quitar la presión diciendo eso, pero la realidad es esa. Nosotros somos una nueva generación que está creciendo, vamos paso a paso.
La pesadilla del Tri es visitar los estadios de Centroamérica, especialmente el Olímpico, ¿cree que será clave?
Por supuesto. También será importante que nosotros desde antes del partido tengamos claro qué es lo que vamos a hacer. Presionar cada balón y ser contundentes. Las que tengamos hay que concretarlas. México cuando tenga la posibilidad te va a anotar.
Ha asimilado el hecho de ser señalado como el responsable a hacer los goles de Honduras...
Yo me mantengo trabajando. Tengo que mejorar mucho. Es verdad que se espera que cierto jugador lleve la responsabilidad de una Selección, pero la gente está equivocada. En el fútbol juegan 11 contra 11. Todos somos importantes. Para sacar esto adelante debemos estar unidos.
¿A sus 22 años es difícil cargar esa responsabilidad?
No cargo con ninguna responsabilidad. Juego para divertirme, porque el fútbol es lo que me gusta. A veces me paso (risas).
Ha enfrentado a México en amistosos, ¿cómo es el ambiente?
Con México no hay amistosos. Ellos siempre quieren ganar y nosotros también. Son partidos que se pelean mucho. Ímaginate si así son los amistosos, cómo serán los de eliminatoria. El juego será una locura.
Hay quienes dicen que esta es la peor Honduras que va a enfrentar a México, ¿qué cree usted?
Siempre se hablan cosas negativas de la Selección. Lo mismo hablaban de la Sub-23. Yo tenía un vecino que decía que Honduras no iba a clasificar a otro mundial después de España 1982. Ya fuimos a dos luego de eso. Todo está en creer. Los futbolistas creemos en nosotros mismos. Muestra de eso son los dos mundiales consecutivos, Juegos Olímpicos, etc.
¿Les ha costado esta transición dentro de la Bicolor?
Eso siempre es complicado. Esta es una nueva generación. La mayoría nos conocemos, pero jugar y competir a este nivel no lo habíamos hecho. Esta Selección está para grandes cosas, solamente hay que creer.
Pinto le tiene mucha fe...
Sé que tiene mucha confianza en mí y eso me compromete porque cada vez que estoy aquí quiero dar lo mejor de mí. Uno a su país siempre quiere darle lo mejor.
¿Se arriesgaría a jugar contra México en un solo pie si es posible?
Me gustaría jugar, pero tampoco me puedo volver loco porque por eso se puede perjudicar a la Selección más que beneficiarla. Si estoy al 100% bien, si no, pues lo mejor sería no jugar.
Del lado mexicano para acá los ojos están puestos en usted...
No sé como me vean ellos. México va a venir como sale en todos los partidos, a ganar. Querrá dominar el partido. No debemos pensar que un solo jugador puede cambiar un juego.
¿Adónde estaba Anthony la última vez que se le ganó a México en SPS?
Estaba en el estadio. Recuerdo que hizo gol Pavón y Costly. En ese entonces estaba en la Sub-17 y el entrenador nos llevó de recogebalones alrededor de la cancha. Fue antes del Mundial de Nigeria. Andaba de repollero (risas).
¿Celebró los goles de Honduras?
Tiraba los balones. Cuando íbamos ganando 3-0 los escondíamos. Recuerdo que uno de los mexicanos quiso pegarle a uno de mis compañeros, que tenía el balón y no se lo quiso dar.
¿Qué pensaba viendo ese estadio lleno, a Costly y Pavón celebrar?
Primero estaba pensando que la Selección ganara, después decía “algún día puedo tener la posibilidad de jugar un partido como este”. Es un sueño que ahora tengo la oportunidad de poder cumplir.
¿A qué jugadores de México destaca?
Hay muchos jugadores buenos en México, pero hay dos que en verdad tienen un nivel increíble. Héctor Herrera que juega en el Oporto es un jugadorazo y Chicharito por la movilidad que tiene dentro del área. También me gusta como juega Carlos Vela.
Piensa en esto: el partido a la tres de la tarde, Honduras viene de perder, México de ganar. ¿Cómo va estar ese juego?
Complicadísimo, pero tenemos que sacarle ventaja a todo ese tipo de cosas. Estamos en casa y cuando México viene acá no es la misma selección. Tienen calidad y grandes futbolistas no se discute; pero en casa nosotros no vamos a pensar en otra cosa que no sea ganar.
Pinto hace poco declaró que “México tiene que venir con buenos pantalones a Honduras”. Faitelson agregó que “con buen fútbol”. ¿Qué opina?
México lo que tiene es buen fútbol, lo demás no sé...ja ja ja. Está claro que van a venir a intentar ganarnos en casa, pero buscaremos evitar eso.
¿Tenemos con qué?
Sí hay, pero más que decírselo a la gente tenemos que demostrarlo en la cancha. Tener ese descaro, esa picardía que necesitamos en los partidos.
¿Este es un partido de “muerte”?
Sí porque estos puntos son valiosísimos; si aspiras a calificar a la siguiente fase, debes ganar en casa. Fuera hay que buscar sumar.
¿Vio el partido entre México y El Salvador?
Lo que pude ver es que es una selección con mucha movilidad, cuando pierden el balón buscan apretar. Sí vi que empezaron a desesperarse un poco a pesar de que iban ganando 1-0. Influyó mucho que la afición les estaba silbando. Se desesperan un poco cuando las cosas no les salen. Es un punto que nosotros debemos utilizarlo a nuestro favor.
¿Qué puede marcar la diferencia ahora que resulta más fácil estudiar a una selección rival?
Me parece impresionante cómo Pinto te da todo lo necesario para ganar un partido. Hasta ahora no he visto a nadie igual al momento de darte las indicaciones. Es una persona que estudia mucho a los rivales.
¿La “Garra catracha” cuenta?
Claro. A pesar del resultado vamos a correr hasta el final. Por chocar o correr no nos va a ganar nadie.
Pavón, Bengtson, Costly y Bennet tienen algún en común: anotarle a México. ¿Quiere entrar a ese grupo selecto?
A quién no (risas). Claro que me gustaría. Estoy seguro que a cualquiera le gustaría anotarle a México y meterse entre esos goleadores. Esto es de poco a poco, no hay que desesperarse. Si me toca jugar voy a intentar anotar, ja, ja, ja.
¿Ha visto los videos de los goles de Honduras contra México?
Sí, los he visto todos. El de Bennet en el Morazán y se me eriza la piel al verlos. Ellos han hecho su propia historia en el fútbol y uno también quiere escribir la propia (reflexiona). Esto es colectivo, pienso en la selección. En mi caso antes de buscar la gloria si puedo dar un pase para que otro anote, se lo voy a dar, no voy a ser egoísta.
Conocemos mucho de Pinto del camerino hacia afuera; pero del camerino para adentró cómo es...
Del camerino para adentro es el que manda. Trata de controlarlo todo, es el jefe.
¿Motivador y exigente?
Sí, siempre busca hacer las cosas a su manera, así como le han dado resultados. Es exigente.
¿Hasta ahora lo ha hecho llorar el fútbol?
De alegría sí. Recuerdo la vez que lloré de verdad. Cuando clasifiqué al Mundial de Egipto, esa vez lloré como nunca.
¿Y de tristeza?
Todavía no y espero no hacerlo.
SU ACTUALIDAD
¿Qué no se sabe de su nueva vida en el Tenerife de España?
No sé si sabrán, pero estoy feliz allá (risas). Estoy contento con esta posibilidad. la gente me ha tratado increíble en Tenerife. Estoy muy agradecido, sobre todo después de todo lo que había pasado. No puedo explicarlo...me siento tan bien y trato de darlo todo para responder. Me estoy jugando mi futuro.
Hablando de su futuro...
Mi futuro ahora está allí. Tenerife es una gran vitrina para darme a conocer internacionalmente. Se caracteriza por eso.
Cuando estaba Edgard y “Rambo” decían que le pesaba tener el pasaporte hondureño, ¿también sucede con usted?
Es complicado. No es lo mismo un hondureño que un argentino. Cuando llegué a Tenerife la gente se preguntaba “y este de dónde salió”. Si uno se mentaliza que tiene la capacidad sin importantar el pasaporte y que se puede llegar a tener éxito, uno lo puede lograr. Siempre he creido que puedo jugar en algún equipo grande de Europa. Hay que creérselo.