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Sunderland, Inglaterra.
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El Chelsea de José Mourinho se mantiene en segunda posición de la Premier League inglesa, a cuatro puntos del líder Arsenal, tras llevarse un loco partido (3-4) ante el Sunderland en el que contaron con un inspirado belga Eden Hazard.
Sunderland y Chelsea se medían en el Estadio de la Luz en un partido marcado por las dudas que estaba creando el equipo de Mou las últimas jornadas, con una derrota en Champions y victorias con remontadas 'in extremis' que no sembraban confianza en la grada blue.
Y no iban a empezar bien las cosas para el cuadro londinense. A los 14 minutos Andrea Dossena dispara y el rebote lo recoge el estadounidense Jozy Altidore para batir a Petr Cech después de un escorzo precioso para dejar clavado a John Terry.
Pero Eden Hazard, el fiel escudero de Mourinho, volvió a sacar su espada para brillar como nadie en el Stadium Of Light. Tres minutos más tarde del gol de los de Poyet, el belga sacó un centro maravilloso en banda izquierda para que Frank Lampard, que solo tenía que poner la cabeza, pusiera el empate en el electrónico.
El partido seguía igualadísimo, y a los 37 minutos, Hazard volvería aparecer, esta vez para driblar de forma individual en una diagonal en la frontal del área para batir a al meta Vito Manonne con un fuerte disparo al palo largo. Se ponía por delante el Chelsea, que aún tendría que sufrir.
Comenzaba la segunda parte y tan solo cinco minutos después, Jhon O'Shea remató al fondo de las mallas después de cazar un rechace que quedó suelto dentro del área.
El Chelsea, sumido en dudas, pudo marcar por medio de Fernando Torres, pero el delantero español falló una ocasión cantada con un rechace de Manonne que dejó la pelota botando a 10 metros de la portería. Fallo de los que crucifican al 'Niño'.
Chelsea apretaba y en el 62 llegaría la gran obra maestra de Eden Hazard. Agarró la pelota en banda izquierda, dribló a dos defensas y cedió el balón para Lampard que, de primeras, devolvió al belga, que se marchó de otros dos defensas y sacó un disparo seco que se coló en la portería de un impotente Manonne.
Phillip Bardsley, zaguero de los rojiblancos, quiso ser protagonista junto a Eden Hazard y en 3 minutos marcó dos goles, uno en cada portería. La suerte se aliaría primero con los Blues en el 83 cuando Demba Ba puso un centro raso dentro del área y el defensor, sin marca, marcó en propia puerta para poner el 2-4.
Cuando ya parecía todo hecho, dos minutos después, un córner botado desde la izquierda acabó rematándolo el propio defensa, dándole picante al final de encuentro.
