México. Christian Giménez se mostró satisfecho por la confianza que le dio José Manuel de la Torre, entrenador de la selección mexicana, ahora para los duelos de eliminatoria ante Honduras y Estados Unidos el 6 y 10 de septiembre, respectivamente.
El mediocampista argentino naturalizado mexicano jugará su primer partido oficial el 6 de septiembre, contra Honduras. Lo hará con los sueños intactos de librar las rocosas eliminatorias y con el coraje de quien sabe que vestir la camiseta nacional es una recompensa por 15 años de carrera, recién cumplidos.
“Sería lo máximo que un jugador puede anhelar, jugar un Mundial, de aquí a jugarlo hay mucho camino que recorrer, mucho sudor y muchos cojones”, comienza diciendo Giménez previo al juego frente a Honduras.
“Juego al cien y más con la oportunidad que me están dando de representar a México. Trato de ser un luchador, como siempre lo he hecho y en la selección tiene que ser así”, dice en una entrevista para el Azteca Deportes.
Algunos no quieren venir a la selección. Otros dan la vida por vestir la casaca mexicana. Así de paradójica es la realidad del futbol mexicano, que no acepta condiciones en los llamados. “Con Carlos Vela y Memo (Ochoa) , ellos son los únicos que saben y el Chepo, por qué no vinieron o no son convocados”.
“Yo ya dije, quiero estar en un momento donde se juega mucho México, me dieron el dulce y quiero seguir, quiero apoyar”.
'El Chaco' de paso le da consejos al 'Chepo' de la Torre sobre la artillería mexicana y pide poner a Oribe Peralta y Javier Hernández. “Ponélo a los dos, los dos juntos en el equipo. Chicharito ha demostrado en Europa que es una bestia, nada más que le faltan minutos y está en un equipo en el que está tapado mucho. Y Oribe está pasando por un momento increíble, creo que hoy por hoy es el mejor jugador del futbol mexicano, de la liga mexicana sin lugar a dudas, hay que aprovechar los momentos, ¿por qué elegir a uno u otro? ¿Maradona o Messi? Los dos son buenos. Hay que disfrutarlos”, sentencia, mientras alza la voz y se le escapa una sonrisa que retumba en La Noria (sede de Cruz Azul). “¿Por qué siempre o uno u otro? ¿por qué no decir los dos son buenos?', agrega.
Ganar y gustar es la asignatura pendiente del conjunto azteca. “Estamos todos con la mentalidad de que tenemos que ganar sí o sí y jugando bien, hay una presión, pero también es algo muy bonito poder demostrarle a la gente que el equipo está más vivo que nunca”.
Perder contra Honduras y Estados Unidos sería inadmisible. “Sería un fracaso total, México en Concacaf siempre fue el número uno, siempre y sería un fracaso no estar. Estamos convencidos que en esta serie de dos partidos con Honduras y Estados Unidos se va a lograr la clasificación”.
El Chaco Giménez entonces volverá a saborear un himno nacional mexicano. “Fue maravilloso, el mejor dulce que probé”. Esta vez en el Estadio Azteca...
SOLO GANAR, NO QUEDA DE OTRA
Este será el primer duelo oficial del 'Chaco'’ y sabe de la relevancia y la presión que puede generar, luego de que no han sacado los resultados que se debieran en la eliminatoria. Además de que un empate o una derrota le pondría la soga al cuello al conjunto del 'Chepo'.
“Son partidos donde no jugamos muchas cosas, vas con la ilusión de hacer buenos partidos, pero primero en el Estadio Azteca tenemos que hacer valer la localía. En la selección siempre hay presión, pero a veces cuando nos presionamos las cosas salen al revés, hay que pensar en positivo y saber qué es lo que queremos, que somos los mejores en este momento; hay que tener el compromiso de sacar adelante esto y obtener un buen resultado”.
Giménez visualiza dos partidos “complicados, pero México tiene que ganar, no le queda de otra. Los partidos que se jugaron en el Azteca, en todos, el rival vino a jugar de la misma manera, a encerrarse y tratar de buscar la desesperación, vamos a tratar de trabajar bien en la semana y plantear un buen partido”.
El mediocampista argentino naturalizado mexicano jugará su primer partido oficial el 6 de septiembre, contra Honduras. Lo hará con los sueños intactos de librar las rocosas eliminatorias y con el coraje de quien sabe que vestir la camiseta nacional es una recompensa por 15 años de carrera, recién cumplidos.
“Sería lo máximo que un jugador puede anhelar, jugar un Mundial, de aquí a jugarlo hay mucho camino que recorrer, mucho sudor y muchos cojones”, comienza diciendo Giménez previo al juego frente a Honduras.
“Juego al cien y más con la oportunidad que me están dando de representar a México. Trato de ser un luchador, como siempre lo he hecho y en la selección tiene que ser así”, dice en una entrevista para el Azteca Deportes.
Algunos no quieren venir a la selección. Otros dan la vida por vestir la casaca mexicana. Así de paradójica es la realidad del futbol mexicano, que no acepta condiciones en los llamados. “Con Carlos Vela y Memo (Ochoa) , ellos son los únicos que saben y el Chepo, por qué no vinieron o no son convocados”.
“Yo ya dije, quiero estar en un momento donde se juega mucho México, me dieron el dulce y quiero seguir, quiero apoyar”.
'El Chaco' de paso le da consejos al 'Chepo' de la Torre sobre la artillería mexicana y pide poner a Oribe Peralta y Javier Hernández. “Ponélo a los dos, los dos juntos en el equipo. Chicharito ha demostrado en Europa que es una bestia, nada más que le faltan minutos y está en un equipo en el que está tapado mucho. Y Oribe está pasando por un momento increíble, creo que hoy por hoy es el mejor jugador del futbol mexicano, de la liga mexicana sin lugar a dudas, hay que aprovechar los momentos, ¿por qué elegir a uno u otro? ¿Maradona o Messi? Los dos son buenos. Hay que disfrutarlos”, sentencia, mientras alza la voz y se le escapa una sonrisa que retumba en La Noria (sede de Cruz Azul). “¿Por qué siempre o uno u otro? ¿por qué no decir los dos son buenos?', agrega.
Ganar y gustar es la asignatura pendiente del conjunto azteca. “Estamos todos con la mentalidad de que tenemos que ganar sí o sí y jugando bien, hay una presión, pero también es algo muy bonito poder demostrarle a la gente que el equipo está más vivo que nunca”.
Perder contra Honduras y Estados Unidos sería inadmisible. “Sería un fracaso total, México en Concacaf siempre fue el número uno, siempre y sería un fracaso no estar. Estamos convencidos que en esta serie de dos partidos con Honduras y Estados Unidos se va a lograr la clasificación”.
El Chaco Giménez entonces volverá a saborear un himno nacional mexicano. “Fue maravilloso, el mejor dulce que probé”. Esta vez en el Estadio Azteca...
SOLO GANAR, NO QUEDA DE OTRA
Este será el primer duelo oficial del 'Chaco'’ y sabe de la relevancia y la presión que puede generar, luego de que no han sacado los resultados que se debieran en la eliminatoria. Además de que un empate o una derrota le pondría la soga al cuello al conjunto del 'Chepo'.
“Son partidos donde no jugamos muchas cosas, vas con la ilusión de hacer buenos partidos, pero primero en el Estadio Azteca tenemos que hacer valer la localía. En la selección siempre hay presión, pero a veces cuando nos presionamos las cosas salen al revés, hay que pensar en positivo y saber qué es lo que queremos, que somos los mejores en este momento; hay que tener el compromiso de sacar adelante esto y obtener un buen resultado”.
Giménez visualiza dos partidos “complicados, pero México tiene que ganar, no le queda de otra. Los partidos que se jugaron en el Azteca, en todos, el rival vino a jugar de la misma manera, a encerrarse y tratar de buscar la desesperación, vamos a tratar de trabajar bien en la semana y plantear un buen partido”.
