SAN PEDRO SULA, HONDURAS.- Si bien es cierto, la seguridad durante la conducción es la prioridad número uno, no hay por qué limitarse de viajar cómodamente.
Varios aspectos juegan un rol importante cuando de sentirse a gusto frente al volante se trata, pero sin duda uno de los principales es cómo se encuentra el interior del vehículo. En todo caso, si vas a pasar tanto tiempo atrapado en el tráfico, todo lo que contribuya a amenizar la espera es bien recibido.
Aquí enumeramos algunos cuidados que debes brindarle al interior de tu carro para sentirte cómodo y relajado cuando viajes a bordo de tu nave.
1. Recuerda que el interior es uno de los factores que mayor impacto tiene en el mercado de los autos seminuevos cuando se va a evaluar una reventa. Y como algunos de los materiales requieren de un cuidado especial, lo mejor es que enfatices en su atención.
2. El cielo del coche es uno de los lugares más propensos a manchas por el tipo de tela que se utiliza y es también difícil lavarlo porque puede deteriorarse fácilmente cuando entra en contacto con agua o detergentes.
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La clave es evitar tocarlo, sobre todo después de comer, para no dejar rastros de grasa.
3. Para las superficies plásticas, como el tablero, las puertas y la consola, procura usar grasas especiales.
4. Evita que los fluidos anteriores caigan en las superficies de tela del interior, como los asientos y revestimientos en puertas, para no mancharlos. Y por ningún motivo los utilices en el volante, los pedales o la palanca de cambios debido a que se volvería más complicado manipular estos mandos.
5. Si la tela se mancha de comida, trata de limpiarla lo más rápido posible para que no se impregne. Incluso puedes colocar sal encima para absorber los restos de grasa. Si se derramó algún líquido, retira el exceso con un trapo limpio y deja secar el interior. Más adelante, lava la tela con limpiadores especiales.
6. Lo ideal es nunca dejar comida o prendas húmedas dentro del carro; pero si por alguna razón el interior conserva algún olor desagradable, hay un truco más allá de la ventilación y el lavado. Coloca varias cucharaditas de bicarbonato de sodio en puntos estratégicos, déjalo ahí un día con las puertas y ventanas cerradas, y luego remueve. Esto absorberá casi cualquier tipo de olores.
7. Si tu auto tiene asientos u otras superficies forradas con piel, se recomienda que pongas especial atención a su cuidado, en razón de que con los cambios de temperatura que se dan en todo un día y el tiempo, estos pueden agrietarse y resquebrajarse.
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8. Debes saber también que algunos de los plásticos en el interior son propensos a decolorarse y a maltratarse con la luz solar.
Así que, aunque es entendible que en muchos casos resulta necesario dejar estacionados los vehículos al aire libre, trata al menos de adquirir los reflejantes especiales para usarlos cuando el mismo quede al alcance de la luz del sol por largos períodos de tiempo.
