SAN PEDRO SULA, HONDURAS.- Debido a la necesidad de movilización cotidiana y ante la dificultad de adquirir vehículos de agencia completamente nuevos, las opciones de segunda mano representan una solución para muchos.
“En países como el nuestro es muy común que la mayor parte de vehículos provengan de aseguradoras en Estados Unidos. Es decir, la mayor parte del parque vehicular es de segunda mano”, introduce Francisco Nájera, gerente de Operaciones de Autec.
Pero antes de apresurarse a hacer una adquisición, ya sea por renovación o por primera vez, hay factores primordiales que todo comprador debe considerar. El kilometraje respecto al año es un punto de referencia por el cual guiarse, pero no un aspecto definitivo antes de hacer una compra.
Teniendo en cuenta que, en su mayoría, estos vehículos ingresan con daños (menores y mayores) por accidente, es imprescindible poder acceder a la información detallada del caso.
“Esto nos da una pauta de la magnitud del accidente que tuvo y así podemos saber si es una buena opción de compra o no”, indica el experto. Asimismo, de qué área en específico es traído el coche juega otra incidencia.
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“Partiendo de esta premisa podemos obtener algo de información indirecta, debido a que en algunas zonas nevadas de Estados Unidos, el uso de sal o productos con altos índices de sal se populariza, a sabiendas de que la sal es el peor enemigo de los metales y las carrocerías. Lo mismo sucede con aquellos sitios que son cercanos al mar”, complementa.
TRABAJOS PREVIOS
Por supuesto, hay que tener en cuenta qué tipo de reparaciones se han llevado a cabo para poder revender los carros. “Algunos importadores, en el afán de ahorrar al máximo sus costos, optan por realizar reparaciones de baja calidad, que a futuro se convierten en problemas para el comprador.
Estas no son solamente estéticas, sino también mecánicas en muchas de las ocasiones”, informa Nájera.
Para vehículos de segunda mano que se encuentran en el país, ya sea comprados en agencia o traídos del exterior, se debe considerar el registro o historial de mantenimiento.
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“Este es un factor clave, pues el mantenimiento preventivo y correctivo puede directamente prolongar o aminorar la vida útil de cada uno de los sistemas. Siempre será una mejor opción un vehículo que esté al día en todos sus sentidos”, esclarece el especialista.
REVISIÓN AL DETALLE
Tu taller de confianza. En cualquiera de los casos siempre es preciso realizar una revisión técnica a todo el vehículo, por expertos en el área y de confianza, que incluya los diagnósticos físicos y electrónicos con equipo certificado para obtener toda la información que almacenan los nódulos de computadoras, medición de compresión y otros factores importantes. Una vez hecha la compra, deberá dar continuidad al mantenimiento preventivo de su nueva adquisición.
Información. Debido a que la mayor parte de vehículos ingresan con daños, ya sea menores o considerables, es importante saber qué tipo de reparaciones se han llevado a cabo para revenderlos.
Calidad. Es imprescindible que se sigan procesos de calidad para poder dejar el vehículo en el mejor estado posible para su funcionamiento, por lo que abocarse con expertos es la mejor opción.
