03/12/2025
07:45 PM

Papallacta, un cálido refugio andino en Ecuador

  • 03 noviembre 2014 /

Un destino sureño que atrae por sus aguas minerales de alto poder curativo y la belleza que las enmarca.

Quito, Ecuador.

Muchas curvas, puentes, subidas y bajadas; montañas, volcanes, lagos, cascadas y ríos. Nada mal para tan solo 70 kilómetros de carretera desde Quito a el valle de Papallacta en Ecuador. Si el día está despejado, bien vale ir parando y capturar panorámicas de cielos azules y cimas nevadas.

Este valle, ubicado a poco más de 3 mil metros de altura, queda ya al lado Este de los Andes.
La lluvia que cae acá tiene como destino el Océano Atlántico, luego de fluir por el Amazonas, a diferencia de la que cae en Quito, que escurre hasta el Pacífico.

El sol se aprecia en lo más alto, pero el viento fresco que no para, amerita una chamarra ligera, y aún más para quienes hacen una caminata por la Reserva Ecológica Cayambe-Coca, que abarca una superficie de casi 4 mil kilómetros cuadrados.

Los senderos discurren paralelos al río. Están diseñados para que el camino de ida no sea el mismo que el de vuelta, y para completarse en una, dos, cuatro u ocho horas. Con algo de suerte, los visitantes se topan a lo largo del paseo con fauna regional, como tapires, llamas, cóndores, águilas y armadillos.

Quienes se aventuren a hacer las caminatas más largas, deben tener en cuenta que la altura también afecta la condición física, aunque un té de hoja de coca es el remedio natural que aquí se usa contra el mal de montaña.

Los árboles y las flores de esta región son exóticos y seductores; uno de los que más llama la atención a los visitantes es una especie de Brugmansia -coloquialmente llamado 'floripondio'-, alucinógena y peligrosa, cuyas flores de un vívido rojo semejan campanas que la brisa tañe, a veces delicada y otras más intensamente.

Pero el mayor atractivo de este lugar son sus aguas termales, que se pueden disfrutar en el balneario, en hoteles y spas.

Su temperatura fluctúa entre los 36 y 42 grados, solo son ligeramente saladas, e inodoras, una característica muy apreciada por los visitantes.

Las propiedades termales y minerales benefician al cuerpo humano: abren los poros, lo que facilita la eliminación de toxinas, reactivan el sistema respiratorio, circulatorio, nervioso y digestivo, además de que, dicen, contribuyen al retardar el envejecimiento.

En el sitio también hay albercas con agua -muy fría- proveniente del río, las cuales se recomienda alternar con las aguas termales.

Para lograr la hazaña hay que lanzarse sin pensar. Viniendo del agua tan caliente, mojarse el pelo y sumergirse por completo en el agua helada es un placer. Aunque algunos dudan en probar al principio, dan ganas de repetir una y otra vez cuando al fin se reúne valor para hacerlo.

Con los picos nevados de los volcanes Cayambe y Antisana al fondo, rodeado por flores y plantas de colores, el sonido del río que baja de la montaña, en una alberca de agua deliciosamente cálida, más de uno se pregunta si sigue en la tierra.

Tierra de aves
Ecuador es uno de los 17 países megadiversos y, debido a su pequeño territorio, es considerado el de mayor diversidad por kilómetro cuadrado en el mundo. En las Galápagos hay fauna que ya se ha vuelto célebre a nivel mundial, como las tortugas y los pájaros bobos de patas azules, pero las estrellas para los ecuatorianos son las aves.

Cerca de 130 especies de colibrís vuelan por los ecosistemas de costa, sierra andina y selva amazónica. En Papallacta se pueden apreciar el Cachudito Torito y el Pinchaflor Negro, principalmente. Ya sea de camino, en el primer mirador de la carretera pasando el poblado de Pifo o en el pequeño refugio de Mulaco.

En el Paso de Papallacta (justo entre las provincias de Pichincha y Napo) hay que estar con la cámara lista para capturar al Colacintillo Coliverde, Cinclo Gorriblanco y el Colibrí Gigante.

En los paseos por la Reserva Ecológica Cayambe-Coca se puede apreciar al Águila Pechinegra y, con mucha suerte, al Cóndor Andino, el emblema nacional que además es una especie amenazada.

Qué comer
Locro de papa (una sopa espesa y caliente), humitas de queso (una suerte de tamales) y cerveza Pilsener, la tradicional del País.

Tip
La moneda de Ecuador es el dólar americano, así que no se preocupe por cambiar al llegar allá.

Foto: La Prensa

En el valle de Papallacta puede observar un bello paisaje rodeado de montañas y volcanes.