En medio de la incertidumbre y sueños por cumplir, una decisión valiente puede marcar el rumbo de toda una vida.
Así comenzó la historia de Aldo Miranda Esquivel, un joven hondureño, ahora Alumni de UTH, que, con esfuerzo, disciplina y el respaldo de las oportunidades internacionales que brinda la Universidad Tecnológica de Honduras, logró cursar su Licenciatura en Turismo y completar una maestría en Dirección de Marketing y Ventas en España.
Hoy, su testimonio motiva a cientos de jóvenes a creer que los sueños, con determinación, pueden hacerse realidad.
Determinación
“Una tarde andaba desorientado, sin saber qué estudiar. Llevé a casa varios planes de estudio de UTH y, sin decirle a mi madre, usé un dinero que tenía y me matriculé en la carrera de Turismo en el campus de San Pedro Sula”, recuerda Aldo. Esa decisión, tomada con valentía, lo llevó a descubrir su vocación, desarrollar sus talentos y proyectarse al mundo.
Desde entonces, tenía claro su objetivo: obtener una maestría antes de los 25 años. “Veía cómo otros estudiantes de UTH se iban al extranjero. Un día me acerqué a la licenciada Waldina y gracias a su asesoría y a las alianzas internacionales de la universidad, logré aplicar y ser elegido para una beca en España”.
Formación internacional
El egresado de UTH Aldo Esquivel cuenta con una licenciatura en Turismo y una Maestría en Dirección de Marketing y Ventas cursada en la Universidad de Extremadura (UEx), España. Actualmente trabaja en la Municipalidad de San Pedro Sula, mientras desarrolla su propio emprendimiento, brindando capacitaciones, talleres y consultorías en temas como atención al cliente, ventas, marketing, turismo, habilidades blandas, trabajo en equipo, entre otros.
Además, está próximo a formalizar legalmente su propia agencia de viajes. “UTH no solo me dio conocimientos, sino también herramientas para competir a nivel internacional y desempeñarme con excelencia en cualquier parte del mundo”, afirma con orgullo.
El poder de las oportunidades
El camino no fue fácil. Durante su estancia en España, enfrentó el reto de vivir la pandemia en confinamiento. “Estuvimos encerrados más de cuatro meses, solo salíamos una vez a la semana. Lo más duro fue estar lejos de mi familia. Pero también fue un tiempo para crecer y recordar que tenía un propósito: formarme y volver más fuerte”.
Su paso por Europa marcó un antes y un después. “Esta experiencia me transformó. Volví con nuevas ideas, habilidades y visión. Gracias a ello, pude desempeñarme durante más de cuatro años como gerente de Isabella’s Boutique Hotel en San Pedro Sula”.
Para quienes hoy sueñan con estudiar en el extranjero, pero no se atreven, su mensaje es claro: “Nunca se rindan. Luchen por lo que quieren. Todo está en la mente. Pongan todo en manos de Dios y crean en ustedes mismos”.
Al recordar toda la experiencia vivida, no duda en afirmar: “Volvería a matricularme en UTH mil veces. Gracias a sus oportunidades, soy quien soy hoy. Mil gracias, UTH, desde lo más profundo de mi corazón”.