San Pedro Sula, al norte de Honduras, ha registrado en las últimas dos semanas el hallazgo de tres cuerpos encostalados, situación que ha encendido las alertas entre las autoridades policiales.
Agentes que trabajan en la investigación señalan que detrás de estos crímenes estarían miembros de la Mara Salvatrucha (MS-13) y que las víctimas tendrían vínculos con la misma estructura criminal.
Uno de los cuerpos corresponde a Selvin David Enamorado Escobar (de 20 años) hallado el 28 de noviembre dentro de sacos frente al campo de fútbol de la colonia Perpetuo Socorro, en el sector sureste. Personal de Medicina Forense que realizó el levantamiento informó que la causa de muerte fue asfixia por estrangulación.
La segunda víctima fue identificada como Gerson Geovanny Gonzales López (de 23), cuyo cuerpo se encontró dentro de sacos a orilla del bulevar del Este, frente a las instalaciones del Instituto de la Propiedad (IP). Al igual que Enamorado Escobar, la causa de muerte fue asfixia por estrangulación.
El tercer cuerpo pertenecía a Cristopher David Guzmán Vargas (de 21). Fue hallado el 5 de diciembre por vecinos de la colonia Los Laureles, a orilla de la carretera que conduce al sector de Ticamaya.
“Las primeras diligencias nos indican que estas personas tenían vínculos con la Mara Salvatrucha y que compañeros de la misma organización les habrían quitado la vida”, declaró uno de los agentes asignados a los casos.
Añadió que aún se desconocen las razones que motivaron los hechos violentos, aunque podrían estar relacionados con desacuerdos internos. “La dinámica de los crímenes es característica de maras y pandillas. Aunque suelen cometerlos contra sus adversarios, también ocurren entre ellos mismos”, aseguró.