Tegucigalpa, Honduras.
La insoportable pestilencia alarmó a visitantes y transeúntes frente al Centro de Medicina Legal y Ciencias Forenses del Ministerio Público.
La causa de la fetidez de cuerpos humanos en descomposición y el derrame de líquidos malolientes se debieron a una avería que sufrió uno de los congeladores destinado para el almacenamiento de cadáveres que aún no han sido reclamados por sus familiares en la morgue capitalina.
Julissa Villanueva, directora de Medicina Forense, reconoció que, en efecto, uno de los espacios destinados a guardar los cadáveres sufrió desperfectos el fin de semana.
“Los cortes de energía eléctrica apagaron los generadores de los cuartos fríos y esto hizo que afectara directamente uno de los condensadores”, explicó Villanueva.
La funcionaria afirmó que “es fundamental darle el mantenimiento a los cuartos fríos, más en un cuarto de morgue de batalla como este”.
Según detalló, no es necesario que haya tantos cuerpos en un cuarto de refrigeración en mal estado para que se desate un hedor similar al experimentado en los últimos días. En la morgue del Ministerio Público hay cuerpos que permanecen un máximo de tres meses en los separos de congelación y enfriamiento, muchos de ellos entran en estado de descomposición.
El cuarto que tuvo el problema fue el de congelamiento, por lo que tuvieron que pasar los cuerpos a otro congelador. Este espacio solo preserva fríos los cuerpos, pero no congelados, sin embargo, ayer ya se realizaban trabajos de reparación.
La insoportable pestilencia alarmó a visitantes y transeúntes frente al Centro de Medicina Legal y Ciencias Forenses del Ministerio Público.
La causa de la fetidez de cuerpos humanos en descomposición y el derrame de líquidos malolientes se debieron a una avería que sufrió uno de los congeladores destinado para el almacenamiento de cadáveres que aún no han sido reclamados por sus familiares en la morgue capitalina.
Julissa Villanueva, directora de Medicina Forense, reconoció que, en efecto, uno de los espacios destinados a guardar los cadáveres sufrió desperfectos el fin de semana.
“Los cortes de energía eléctrica apagaron los generadores de los cuartos fríos y esto hizo que afectara directamente uno de los condensadores”, explicó Villanueva.
| El mal olor se tornó insoportable en horas del día.
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Según detalló, no es necesario que haya tantos cuerpos en un cuarto de refrigeración en mal estado para que se desate un hedor similar al experimentado en los últimos días. En la morgue del Ministerio Público hay cuerpos que permanecen un máximo de tres meses en los separos de congelación y enfriamiento, muchos de ellos entran en estado de descomposición.
El cuarto que tuvo el problema fue el de congelamiento, por lo que tuvieron que pasar los cuerpos a otro congelador. Este espacio solo preserva fríos los cuerpos, pero no congelados, sin embargo, ayer ya se realizaban trabajos de reparación.
