Lempira, Honduras
El punto en el que debían tocar tierra era el campo de fútbol de La Unión, adonde muchos estaban a la expectativa de su descenso para ser aplaudidos por tan singular destreza.
Suspenderse en el aire era para Tito Olivera González (de 29 años) una pasión. Su adiestramiento como teniente de Fuerzas Especiales lo colocó como uno de los soldados más disciplinados, aplicados y perseverantes.
Pasó duras pruebas para convertirse en un Tesón, donde se destacó en las operaciones anfibias, de montaña, de asalto aéreo, aeromóviles y combate cercano. Participó en las Fuerzas Comando Paraguay en 2017.
Pasó con honores el adiestramiento en paracaidismo, pero ayer, cuando era parte del equipo de una demostración con fines recreativos que realizaba junto a varios de sus compañeros en La Unión, Lempira, perdió la vida en un salto libre tras caer desde 5,000 pies de altura.
Olivera González viajó por vía aérea de la capital a La Unión para realizar un show de paracaidismo, con motivo de la feria patronal.
 Olivera obtuvo numerosos premios y reconocimientos, representando a Honduras.
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El helicóptero de la Fuerza Aérea Hondureña se elevó y minutos después se inició el espectáculo. Se tiraron cinco paracaidistas, casi a la vez en ese salto libre, el cuarto en hacerlo fue Tito Olivera. Todo indicaba que el salto sería exitoso.
A unos mil pies después de haber saltado del helicóptero, los paracaidistas, por norma, debieron abrir sus paracaídas o, en su defecto, un dispositivo conocido como piloto, integrado en ese artefacto de uso militar, lo abriría sin necesidad de que el oficial lo activara.
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Por las circunstancias en las que se desarrolló esta peligrosa actividad, se desconoce hasta el momento si Olivera activó el paracaídas a los 4,000 pies de altura como lo establece el protocolo de paracaidismo o si fue el mecanismo llamado piloto el que lo accionó a los 2,500 pies de altura.
Vecinos de La Unión grabaron el momento en que el paracaidista caía de forma libre directo a la tierra y su paracaídas venía prácticamente enrollado. El hecho causó asombro y consternación en los pobladores.
Muchos corrieron hasta el lugar, en las afueras del pueblo, para ver qué había ocurrido con el paracaidista. Lamentablemente el hombre ya estaba muerto, en medio de su compañero de aventuras, el paracaídas.
Muy compungidos, sus cuatro compañeros llegaron a la zona para constatar la tragedia. El vocero de las Fuerzas Armadas, José Domingo Meza, informó que el oficial se precipitó sobre una zona montañosa. “Se hará una investigación de los hechos para determinar las causas que originaron el accidente”.
