Parte de las pruebas que maneja el Ministerio Público (MP) contra Katherine Yulibeth Romero Soto, acusada de abuso sexual contra sus dos hijastros, indican que existen mensajes telefónicos que la vincularían con el delito.
Según el expediente, los vaciados telefónicos realizados en varios dispositivos móviles revelan mensajes que comprometerían a la acusada, quien enfrenta cargos por violación continuada calificada y otras agresiones sexuales calificadas continuadas.
Romero Soto (de 28 años), quien guarda prisión en la cárcel de mujeres en Támara desde la audiencia de imputado el fin de semana, fue llevada este día en horas de la mañana a la audiencia inicial al juzgado sampedrano.
La audiencia inicial se llevaría a cabo en el Centro Integrado de Justicia Penal (Cein), en el barrio El Centro, debido a que se utilizó la cámara Gesell, un espacio especializado para recibir las declaraciones de víctimas menores de edad o testigos vulnerables.
Sin embargo, por no haber energía eléctrica, la audiencia se trasladó a los juzgados sampedranos en la 33 calle. Además de los abogados, fiscales, se presentó la madre de los menores.
Por la tarde, el juez suspendió la audiencia, pero la reanudará mañana jueves 29 de mayo a las 3:30 pm para emitir una resolución, que podría ser un auto de formal procesamiento (que seguirá en prisión) o sobreseimiento a favor de la acusada.
Elvis Guzmán, portavoz del MP, informó que “el Ministerio Público presentó en la audiencia inicial los elementos que supuestamente vinculan a la sospechosa a los delitos que se le imputan. Entre los elementos hay vaciados telefónicos donde se supone, hay conversaciones y mensajes comprometedores y el dictamen psicológico y médico forense que establece los hechos que vinculan a la imputada”.
Aunque el portavoz no precisó mayores detalles de la investigación, sí dijo que la denuncia en contra de la acusada la interpuso la mamá de los menores.
Las investigaciones de la Fiscalía señala que los abusos que habría sufrido el niño, ahora de 14 años, “ocurrieron a lo largo de seis años, durante las visitas de fin de semana a su padre y los periodos en que él y su hermana de 10 años quedaban bajo el cuidado de la acusada”.
Yulibeth Romero fue detenida el 26 de mayo cerca de un centro comercial en San Pedro Suila.
