Fany Giselle Reyes, 17 años, fue asesinada ayer a las seis de la tarde en la colonia La Unión por tres sujetos que entraron por la fuerza a su casa, informó la policía.
Dice la autoridad que tres sujetos desconocidos que andaban a pie llegaron a la pequeña casa donde vivía Fany con su abuela y otros parientes, sólo a cometer el crimen.
Entraron por la fuerza hasta la parte trasera de la vivienda y al encontrar a la muchacha con una hija de nueve meses en brazos, le arrebataron la criatura y la tiraron al suelo. Inmediatamente después le dispararon repetidamente hasta matarla.
Los maleantes procedieron luego a registrar toda la vivienda, buscando “no se sabe qué”. Al no encontrar nada salieron y huyeron con rumbo desconocido.
El crimen ocurrió en la 8 y 4 avenida, 32 calle, de la conflictiva colonia La Unión, cerca de una ferretería.
La policía preventiva destacó una patrulla al lugar del crimen, un pasaje estrecho y donde los vecinos viven en constante zozobra por la permanente incidencia delictiva de esa zona.
Los parientes de la infortunada, Fany Gisselle, entre llantos, dijeron desconocer los motivos que tuvieron los desconocidos para ensañarse contra la muchacha quien se dedicaba a cuidar de su niña y estaba buscando trabajo en estos días a pesar que aún no contaba con su cédula de identidad.
Los vecinos se mostraron reacios a dar declaraciones y sólo mencionaron que escucharon disparos pero nadie se atreve a dar más declaraciones por temor a las represalias.
Según un oficial, la forma en que se produjo el crimen da lugar para considerar el mismo como una represalia o venganza personal cometido por miembros de una mara.
