San Pedro Sula. Los 743 kilos de cocaína decomisados en un operativo el pasado 22 de abril a inmediaciones de la aldea Villa Nápoles, municipio de Taulabé, Comayagua, fueron destruidos ayer.
Los juzgados de jurisdicción nacional, la Fiscalía Especial contra el Crimen Organizado, agentes de la Lucha contra el Narcotráfico y militares participaron en la quema de la droga tras la solicitud del Ministerio Público.
El cargamento fue decomisado tras un fuerte operativo que se desarrolló en esa zona luego que miembros de Operaciones Especiales Tácticas (Goet), Policía Nacional y unidades de la Embajada de Estados Unidos dieron seguimiento a una rastra que transportaba ganado y que salió de Poncaya, Olancho.
El cabezal con placas AAM 1072 transportaba 45 toros y terneros a un rancho cerca de Copán Ruinas, fronterizo con Guatemala, informaron las autoridades.
La cocaína iba oculta en compartimientos en la parte superior del camión. Las autoridades estimaron que el cargamento estaba valorado en 29 millones de dólares y es considerado uno de los más fuertes golpes que han dado las fuerzas de seguridad en los últimos meses al crimen organizado, junto con el decomiso de más de dos mil kilos de cocaína en un barco en Puerto Cortés en enero.
Por ese caso las autoridades detuvieron a Óscar Gabriel Santos, originario de Langue, Valle, y residente en Baracoa, Cortés, quien supuestamente estaba a cargo de cuidar el ganado; el motorista del vehículo huyó y hay sobre él orden de captura.
Procedimiento
Ayer a eso de las 11:00 am en el batallón de Naco, Cortés, se quemó el cargamento de cocaína. Fiscales, agentes de la Dirección Nacional de Lucha contra el Narcotráfico (DLCN), técnicos forenses, unidades policiales y agentes de Narcóticos participaron de la acción tras la solicitud que hizo el Ministerio Público. Antes de que le prendieran fuego a la droga se hizo un peritaje para establecer la pureza de la cocaína y nuevamente ayer antes de la quema se tomaron al azar 10 paquetes para verificar que era la droga decomisada.
Elvis Guzmán, portavoz del Ministerio Público, dijo que los 743 paquetes fueron contados tres veces, las autoridades en mención participaron de ese proceso. Los paquetes fueron lanzados en un predio con una hondonada de ese batallón para ser mojados con gasolina. Los militares permanecieron en esa zona hasta que la droga fuera consumida por el fuego.
En los últimos tres meses, desde que inició operaciones la Fusina, las autoridades hondureñas reportan la incautación de 6,962 kilos de droga y la destrucción de 20 narcopistas en Gracias a Dios, Colón, Yoro y El Paraíso.
