En un giro inesperado, la Fiscalía de Danlí decidió liberar a una mujer acusada de utilizar a su propio hijo como “mula” para ingresar drogas a la cárcel de máxima seguridad conocida como La Tolva, ubicada en el municipio de Morocelí, El Paraíso.
A pesar de las pruebas presentadas que mostraban una despiadada y absurda complicidad, la Fiscalía de turno ha determinado un autónomo de libertad a favor de la joven madre.
Según argumenta la Fiscalía, no se pudo establecer de manera concluyente que la mujer utilizara a su hijo para introducir drogas al centro penal, a pesar de las imágenes captadas por el escáner corporal.
Lorena Cálix, portavoz del Ministerio Público, señaló que los videos proporcionados por las autoridades penitenciarias no brindaron certeza sobre la participación de la mujer en el delito. Además, resaltó que la Fiscalía no recibió notificación alguna sobre la presencia del niño de dos años, lo que imposibilitó la evaluación forense del menor.
Por otro lado, el Ministerio Público informó que el padre del niño negó la implicación de su pareja y su hijo en el tráfico de drogas. Sin embargo, el comandante de la Policía Militar de Orden Público (PMOP), Ramiro Muñoz, acusó a la Fiscalía de negligencia por no ejecutar la detención de la madre del menor, a pesar de las pruebas presentadas.
Muñoz denunció que casos similares están ocurriendo en varias cárceles del país y anunció la prohibición del ingreso de niños a los centros penales. Además, reveló casos de prostitución infantil dentro de las prisiones, acciones permitidas por los propios padres durante las visitas.
