Tegucigalpa, Honduras.
El rostro del profesor Mario Alberto Morazán Ramírez (de 58 años), ya no le dará la bienvenida a los alumnos del Instituto Técnico Honduras (ITH), ubicado en la colonia Kennedy de la capital. Dos certeros disparos acabaron con su trayectoria docente de más de 30 años.
Luto y conmoción causó entre alumnos, docentes y familiares el deceso violento de Morazán, quien murió a manos de un gatillero que le quitó la vida frente al instituto donde fungía como consejero y a la vez impartía algunas asignaturas.
El ataque
Todo se originó por una riña entre dos jovencitas del colegio, el martes pasado.
Como su labor de consejero era tratar de solucionar los problemas de los estudiantes, citó a ambas alumnas a la Consejería para buscar una solución al pleito.
Las dos adolescentes se fueron a sus casas para presentarse ayer miércoles con sus padres, pero eso no ocurrió.
En representación de una de las jóvenes involucradas llegaron al colegio sus dos hermanos mayores (un hombre y una mujer).
Nelson Cálix, director del ITH, relató que “ayer (martes) hubo una pelea normal, como puede haber entre cualquier adolescente, yo las separé”.
“Llegaron (los hermanos) furibundos, cuando empezó a gritar (uno de ellos) en la Dirección le ordené que se saliera y que respetara la instancia; el profesor Mario, cumpliendo la instrucción, los acompañó a la salida y ahí le pegaron los disparos”, relató el rector del ITH.
Los dos hermanos de la estudiante responden a los nombres de Roxana y Marcos Ariel Sarmiento Ruiz. Ambos llegaron juntos a bordo de una motocicleta, la cual dejaron estacionada frente al colegio.
Cuando estaban en el acceso al ITH, Roxana sacó de un bolso una pistola calibre 9 mm la cual entregó a su hermano y este disparó contra el maestro, ante la presencia de decenas de estudiantes.
El catedrático fue llevado en una ambulancia del 911 hasta el Seguro Social, pero al llegar a este centro médico ya no tenía signos vitales. Mientras tanto el victimario huyó a bordo de la moto.
Su esposa y también maestra en el ITH entre lágrimas manifestó que “ya tenía listos sus papeles de jubilación, pero le faltaba hacer algunos trámites”. Lamentó que debido a las últimas reformas hechas en materia de educación su esposo no pudo jubilarse con la ley anterior, “si no él hubiera estado reposando en su casa y no en el colegio”.
El rostro del profesor Mario Alberto Morazán Ramírez (de 58 años), ya no le dará la bienvenida a los alumnos del Instituto Técnico Honduras (ITH), ubicado en la colonia Kennedy de la capital. Dos certeros disparos acabaron con su trayectoria docente de más de 30 años.
Luto y conmoción causó entre alumnos, docentes y familiares el deceso violento de Morazán, quien murió a manos de un gatillero que le quitó la vida frente al instituto donde fungía como consejero y a la vez impartía algunas asignaturas.
El ataque
Todo se originó por una riña entre dos jovencitas del colegio, el martes pasado.
Como su labor de consejero era tratar de solucionar los problemas de los estudiantes, citó a ambas alumnas a la Consejería para buscar una solución al pleito.
| El féretro del catedrático fue cargado por sus compañeros para luego ser trasladado a una funeraria de la capital.
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En representación de una de las jóvenes involucradas llegaron al colegio sus dos hermanos mayores (un hombre y una mujer).
Nelson Cálix, director del ITH, relató que “ayer (martes) hubo una pelea normal, como puede haber entre cualquier adolescente, yo las separé”.
“Llegaron (los hermanos) furibundos, cuando empezó a gritar (uno de ellos) en la Dirección le ordené que se saliera y que respetara la instancia; el profesor Mario, cumpliendo la instrucción, los acompañó a la salida y ahí le pegaron los disparos”, relató el rector del ITH.
 Los estudiantes se vieron alarmados después de presenciar el ataque armado contra uno de los maestros más queridos dentro del instituto.
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Cuando estaban en el acceso al ITH, Roxana sacó de un bolso una pistola calibre 9 mm la cual entregó a su hermano y este disparó contra el maestro, ante la presencia de decenas de estudiantes.
El catedrático fue llevado en una ambulancia del 911 hasta el Seguro Social, pero al llegar a este centro médico ya no tenía signos vitales. Mientras tanto el victimario huyó a bordo de la moto.
Su esposa y también maestra en el ITH entre lágrimas manifestó que “ya tenía listos sus papeles de jubilación, pero le faltaba hacer algunos trámites”. Lamentó que debido a las últimas reformas hechas en materia de educación su esposo no pudo jubilarse con la ley anterior, “si no él hubiera estado reposando en su casa y no en el colegio”.
 La Policía detuvo para investigación a las hermanas Sarmiento, tanto la alumna como a Roxana Sarmiento, dueña del arma homicida.
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