La Policía le asestó ayer un nuevo golpe a “la industria del secuestro” con el rescate de un estudiante de 16 años de una escuela privada, tras diez días de haber sido plagiado.
El menor fue raptado el pasado 14 de enero por varios sujetos que se transportaban en varios vehículos.
“Agradezco a Honduras y a las autoridades y deseo que a nadie le pase lo que me pasó a mí”, fueron las palabras del menor al momento de reencontrarse con su familia.
Fundido en fuertes abrazos, el jovencito fue recibido por sus padres y sus hermanos, quienes no dejaron de agradecer a Dios por haberles regresado a su hijo.
El estudiante del primer curso de bachillerato en un colegio privado de la capital fue raptado cuando pretendía abordar el bus escolar. Al tenerlo en cautiverio, los secuestradores exigían la cantidad de ocho millones de lempiras para dejarlo en libertad.
Cuando los padres del muchacho les decían que no tenían dinero para el rescate, los delincuentes manifestaban que entonces lo cortarían en pedazos y así lo entregarían.
El menor fue rescatado en una vivienda ubicada en la colonia Arturo Quezada de Comayagüela. “Estamos muy agradecidos con Dios y con las autoridades también. Yo les pido a todos que colaboremos con nuestras autoridades. Realmente es lamentable pasar por esta situación y no puede seguir así”, declaró el padre del joven.
Ubican casa
Óscar Álvarez, ministro de Seguridad, afirmó que desde el domingo tenían alguna información del lugar adonde mantenían cautivo al jovencito.
Pero fue hasta ayer por la tarde que después de haber montado vigilancia y al estar seguros de que era el lugar correcto, elementos del Grupo Especial Antisecuestros ingresaron a la vivienda para rescatar al menor.
En el interior de la casa se detuvo a Mario Moisés Ordoñez Méndez, de 19 años, residente en la colonia 3 de Mayo de Comayagüela.
Según los agentes del Geas, el detenido supuestamente era el que se encargaba de cuidar al estudiante.
El capturado dijo que era inocente de los cargos y que no sabía que el muchacho secuestrado estaba en la casa.
Dijo que llegó a la casa en la cual reside su amigo Josué Hernández a traer una grabadora que le había prestado unos días antes.
Cabecilla
Álvarez indicó que se trabaja en la ubicación del cabecilla de la banda de secuestradores del menor. De no ser así se dará a conocer la fotografía con los datos del secuestrador, por el cual se estaría ofreciendo una recompensa para la persona que denuncie su paradero.
En la liberación participaron agentes del Geas, de la Policía Nacional y de la Dirección Nacional de Investigación Criminal.
