El mes de prevención y lucha contra el cáncer de mama ya se va, pero deja inmensa solidaridad en los corazones de muchas hondureñas.
Claudia Bulnes, Giselle Downing y María Alexandra Canahuati son esos rostros que inyectan optimismo por la vida en muchas mujeres de toda la nación.
No cabe duda de que el color que debería identificar la solidaridad en este mes contra el cáncer de mama debe ser el verde, significado de esperanza. Ese es el sentimiento que en realidad siembran estas tres sampedranas aportando a través de sus trabajos desinteresados y a tiempo completo a la concienciación para prevenir el terrible mal.
Hoy no las vestimos de rosa como todo el mundo. Las pintamos de esperanza para transformar la historia como ellas lo están haciendo con su entrega a servir a las más necesitadas y evitar que las estadísticas de muerte aumenten.
Flamas de bondad. Claudia Bulnes es el rostro de la compañía cosmética Avon de Honduras en la ciudad. Se ha volcado a crear iniciativas que recolecten fondos económicos para donarlos a la Liga contra el Cáncer de San Pedro Sula y el centro de cáncer Emma Romero de Callejas de Tegucigalpa. Desde hace más de 10 años, Avon ha donado millonarias sumas de dinero para apoyar esta incansable labor filantrópica.
Giselle Downing de Paz no solo tiene un compromiso altruista con Honduras por ser miembro del Comité nacional de lucha contra el cáncer de mama desde que se fundó hace 15 años, ella además es sobreviviente de este mal que la sorprendió pero que combatió a tiempo.
María Alexandra Canahuati de Vogelsang es otra de esas flamas que iluminan la esperanza en el país. A través de Yude Canahuati y Ford, desde hace 11 años se unen al mes rosa con charlas de concienciación, campañas publicitarias de prevención y la donación de mamografías por cada Ford vendido en Yude durante octubre.
Toda esta pasión en rosa nació desde que a su madre le diagnosticaron cáncer de seno por medio de una mamografía. Esto la estremeció y la hizo reflexionar sobre la responsabilidad social que debe haber en cada hondureño.
Hoy, cada una de ellas comparte su historia, su satisfacción, su mensaje, su emoción y sobre todo la esperanza con la que año a año se visten para servir.
La lucha no ha sido fácil, por ello Claudia, Giselle y María Alexandra se han comprometido más por la educación femenina en el tema de la prevención y aportar confianza en cada mujer, y despiden el mes rosa con mucha esperanza.