SAN PEDRO SULA. “El amor no tiene cura, pero es la única cura para todos los males”, expresó en algún momento de su vida el poeta Leonard Cohen. Y sin duda, para Gabriela Davadi Flores y José Alejandro Bandy Vivas ha sido el remedio para construir una vida juntos, habitada por el amor.
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Los novios llevaron a cabo su unión matrimonial eclesiástica en la Parroquia La Santa Cruz de la Colonia Tara, donde el padre Erlein Mora fue quien dirigió la ceremonia. Al darse el “sí, acepto”, los nuevos esposos se dieron un beso de ensueño, con el cual soñaron por mucho tiempo.
Los padres de la novia, Eduardo Davadi y Sonia Flores; así como los padres del novio, Shilby Bandy y Marisol Vivas, lucieron elegantes en su vestimenta, complementados con la sonrisa que los denotó felices en la consagración religiosa de sus queridos hijos.
De igual forma, los padrinos Alejandro Alvarado y Rita Flores, padrinos de la boda, se hicieron presentes para acompañar y ser la guía de la nueva familia que se conforma.
Gabriela Davadi lució su hermoso vestido Mori Lee al estilo princesa, con el cual resaltó su silueta, mientras el novio vistió un clásico tuxedo que lo hizo ver apuesto.
Más tarde, los protagonistas, sus familiares y amistades que llegaron, se trasladaron al salón Jordan del Club Hondureño Árabe, donde la recepción fue una amena fiesta. La wedding planner del festejo fue Nathaly Davadi, quien con su orden y creatividad hicieron un programa corto, entretenido y acentuado por el romance.
Asimismo, la decoradora Vanessa Wills se inspiró en el verde esmeralda, color catalogado como la piedra del éxito en la pareja. Avanzaron las horas y la fiesta estuvo bajo el mando de Dj David, quien mezcló música bailable para deleite de los presentes y en celebración al amor que Dios ha consumado.
