30/04/2024
12:50 AM

Más de 100,000 sampedranos se benefician con programas de parroquia

El dispensario Padre Claret de la Rivera Hernández amplió sus servicios y tiene unas 200 medicinas disponibles, la meta es volverlo autosostenible.

San Pedro Sula, Honduras.

Los proyectos sociales de la parroquia Inmaculado Corazón de María son un abanico de opciones para las más de 100,000 personas que viven en la Rivera Hernández, considerado un sector castigado por la violencia y con pocas oportunidades.

El padre claretiano Porfirio Ruiz es uno de los pioneros de los programas junto a su hermano Teodoro Ruiz, que ya falleció. Vinieron de su natal España hace 20 años y sembraron la semilla que germinó y hoy sirve a miles de personas.

Los proyectos sociales de solidaridad son obras diseñadas y ejecutadas a favor de los más pobres del sector y comprenden el dispensario Padre Claret, la guardería Inmaculado Corazón de María, el centro de alcance Por mi Barrio, microempresa de panadería y repostería San José, Ayúdame a Vivir, y Plan 20.

El padre Ruiz explicó que buscan que las personas del sector aprovechen los programas y se vuelvan autosostenibles.

El sacerdote asegura que hay limitaciones, pero la infraestructura donde funcionan los centros está en buen estado y debe aprovecharse.

La deficiencia de los servicios públicos de salud en la Rivera Hernández son la discontinuidad en la atención primaria, la escasez de medicamentos y ausencia de especialistas para una población muy importante.

Sumado a ello, las malas condiciones ambientales y la ausencia de canalización de aguas negras en algunos lugares agravan la salud de la población con alta incidencia en enfermedades ligadas a la falta de higiene y el ambiente. Los programas se encuentran ubicados en la colonia Padre Claret de Asentamientos Humanos.

LA PRENSA realizó un recorrido por el inmueble donde funcionan los proyectos y está en excelentes condiciones y hasta subutilizado, por lo que es importante que puedan unificarse otros servicios de salud de la zona para aprovechar la infraestructura.

Los programas

El dispensario ofrece servicios de consulta médica, enfermería, laboratorio, odontología y farmacia. Brinda servicios de salud a unos 25 pacientes al día que no tienen los recursos económicos para pagar los costos de la atención médica y medicinas.

La guardería Inmaculado Corazón de María se encarga de brindar apoyo a las madres solteras cuidando a sus niños, dando oportunidad para que ellas trabajen. En su mayoría trabajan en maquilas, como cocineras o limpiando calles con la Municipalidad, lavado de ropa, venta de pan y de verduras.

La guardería abre sus puertas a niños de seis meses a seis años con un horario de atención de 6:00 am a 5:00 pm. Cubriendo sus necesidades básicas de alimentación, salud, educación, higiene personal y una atención personalizada.

El centro de alcance tiene como misión prevenir la violencia juvenil en la colonia Asentimientos Humanos brindando oportunidad de recreación y formación en talleres como deportes, belleza, panadería y repostería.

La microempresa de panadería y repostería San José busca contribuir al fortalecimiento socioeconómico de las mujeres mediante la creación de la microempresa de panadería para mejorar la seguridad alimentaria.

En el programa de tercera edad Ayúdame a Vivir atienden un promedio de 80 ancianos y se reúnen una vez a la semana en las instalaciones de la guardería, ahí se les proporciona terapias físicas, atención médica, medicinas y trabajos manuales.

Hace unos meses se les proporcionaba semanalmente una bolsa de leche en polvo, “la cual no pudimos seguírselas proporcionando por falta de recursos económicos. La meta es retomar esta donación”, contó el padre.

El programa Plan 20 es destinado al acompañamiento y ayuda de personas viviendo con VIH/Sida, “con quienes nos reunimos semanalmente y se les imparten temas de formación sobre autoestima, espiritualidad, prevención, cuidados, control y consumo de medicamentos, además se les brinda atención médica, alimentos y ayuda económica”.