El 2024 inició con el reporte de más de 100 casos de dengue en la Capital Industrial, y cada semana ha ido en aumento hasta registrar 235 en la segunda semana de febrero.
La situación es crítica, pues el acumulado de 42 días o seis primeras semanas epidemiológicas de este año reportan 1,017 casos de la enfermedad, cifra que representa el 40.60% del total de los enfermos por dengue en 2023 en esta ciudad, que fueron 2,500. Asimismo dos menores de 20 años, procedentes de barrio Las Palmas y Cabañas murieron de dengue y relacionado a otras complicaciones de salud.
La alcaldía municipal declaró emergencia por dengue el 3 de febrero pasado y se destinan 9 millones para la compra de máquinas termonebulizadoras, las cuales pasaron de 20 a 31 y se están gestionando otras que están en cotizaciones. Asimismo se asignó personal extra de otras gerencias para apoyar a la Gerencia de Salud a cargo de esta labor, en tanto que la 105 Brigada de Infantería, asignó desde ayer 25 uniformados a reforzar estas labores.
Sin embargo todas estas acciones siguen siendo insuficientes porque la población sigue sin hacer su parte clave: no colocar recipientes de agua al aire libre en sus casas y cortar la maleza, según Rafael Rodríguez, encargado de las fumigaciones de la alcaldía.
Este funcionario, que ayer realizaba una intervención de barrio Cabañas, declaró que hay un problema cultural en la población, pues a pesar de las múltiples alertas, pasan haciendo barridos en las casas, y en cuestión de días, cuando vuelven a pasar, ya hay de nuevo recipientes en los patios.
También hay poco interés de realizar la untadita en las pilas, la que se hace lavando con detergente y cloro. Otro problema es que un gran número de residentes no abren las puertas para la fumigación con previa inspección de la propiedad.
Acciones
La Sala Situacional de Dengue se implementó a raíz de esta crisis. Ahí todas las autoridades de Salud analizan y evalúan sistemáticamente la información captada de todos los centros de salud y hospitales sobre casos y su procedencia, y de ahí se determina la prioridad de los barridos.
También se reactivó la mesa intersectorial, con presencia de todas entidades y comunidades, en donde se busca generar compromisos que hasta el momento no han tenido éxito.
Alma Barahona, epidemióloga de la Región Metropolitana de Salud de la ciudad, ha alertado en reiteradas ocasiones sobre el panorama sombrío que podría acontecer en San Pedro Sula si no hay descenso del contagio.
“Se están haciendo los barridos, se generan estrategias y analizan las cifras constantemente, esperamos que esto cambie, en la Sala Situacional hemos abordado que de no ser así se tendría que organizar las salas dengue en los hospitales, cada cuatro o cinco años hay una epidemia dengue, la última fue la de 2019”, comentó.
Carlos Rivera, epidemiólogo de la Región de Salud de Cortés, exhortó a la población a colaborar limpiando sus casas, porque son los niños los más vulnerables al dengue y la única forma de luchar contra el zancudo es la colaboración de todos.
