San Pedro Sula.
Preocupados por la ola de violencia se encuentran los pobladores de varias colonias en el noreste de San Pedro Sula.
Varios vecinos denunciaron a Barrios y Colonias de LA PRENSA que desde el mes pasado han aumentado los asaltos en los buses de la ruta 10, que trasladan a los usuarios de las colonias Real del Campo, Bosques de Jucutuma, La Pedrosa, Arenales, Nueva Inversión, entre otras, hasta el centro de San Pedro Sula.
“Los malvivientes se suben a los buses como pasajeros y cuando llegan a determinado lugar despojan de sus pertenencias a las víctimas”, dijo una ciudadana que por seguridad omitió su nombre.
Las zonas de mayor riesgo son trayecto de los bordos, afuera de los predios de Tránsito, en el perímetro de la escuela Álvaro Contreras y en el desvío de los Guifarro.
Pese a que en la entrada de Cemcol y frente al centro básico en mención hay constantes retenes policiales, ha sido imposible frenar los hechos delictivos, y por ello los perjudicados exigen aumentar los operativos durante la época navideña, ya que hay mayor movimiento de ciudadanos en las calles, también piden vigilancia dentro las unidades de la ruta 10.
“Cada cinco o diez minutos pasa un rapidito haciendo el recorrido, la Policía debería inspeccionar las unidades al menos en diciembre porque muchos están expuestos a entregar sus aguinaldos a los ladrones”, denunció Carlos Hernández, otro poblador que a diario viaja en la ruta. Algunos peatones manifestaron que les roban cuando se dirigen a tomar el bus.
Preocupados por la ola de violencia se encuentran los pobladores de varias colonias en el noreste de San Pedro Sula.
Varios vecinos denunciaron a Barrios y Colonias de LA PRENSA que desde el mes pasado han aumentado los asaltos en los buses de la ruta 10, que trasladan a los usuarios de las colonias Real del Campo, Bosques de Jucutuma, La Pedrosa, Arenales, Nueva Inversión, entre otras, hasta el centro de San Pedro Sula.
“Los malvivientes se suben a los buses como pasajeros y cuando llegan a determinado lugar despojan de sus pertenencias a las víctimas”, dijo una ciudadana que por seguridad omitió su nombre.
Las zonas de mayor riesgo son trayecto de los bordos, afuera de los predios de Tránsito, en el perímetro de la escuela Álvaro Contreras y en el desvío de los Guifarro.
Pese a que en la entrada de Cemcol y frente al centro básico en mención hay constantes retenes policiales, ha sido imposible frenar los hechos delictivos, y por ello los perjudicados exigen aumentar los operativos durante la época navideña, ya que hay mayor movimiento de ciudadanos en las calles, también piden vigilancia dentro las unidades de la ruta 10.
“Cada cinco o diez minutos pasa un rapidito haciendo el recorrido, la Policía debería inspeccionar las unidades al menos en diciembre porque muchos están expuestos a entregar sus aguinaldos a los ladrones”, denunció Carlos Hernández, otro poblador que a diario viaja en la ruta. Algunos peatones manifestaron que les roban cuando se dirigen a tomar el bus.