USA incauta cocaína suficiente para causar sobredosis letal a toda Florida
Guardia Costera de Estados Unidos incauta más de 76 mil libras de droga en altamar. Golpe histórico al narcotráfico evitó que se produjeran 23 millones de sobredosis e impidió que los carteles recibieran medio billón de dólares en ingresos ilícitos
- 25 de agosto de 2025 a las 16:08 /
Estados Unidos dejó de esperar que la droga tocara sus puertas para incautarla. Ahora, con apoyo de países socios, la localizan en altamar, tanto en el Atlántico como en el Pacífico, lo que les ha permitido dar lo que califican como uno de los mayores golpes de la historia contra el narcotráfico.
La Guardia Costera celebró este lunes un hito histórico en Port Everglades al descargar 76,140 libras de narcóticos ilícitos, valorados en 473 millones de dólares, la mayor cantidad de droga decomisada en toda su historia.
La operación estuvo a cargo del Guardacostas Cutter Hamilton, cuya tripulación descargó 61,740 libras de cocaína y 14,400 libras de marihuana.
Según la institución, este golpe evitó que llegaran a Estados Unidos "23 millones de posibles dosis letales, lo que representa una amenaza equivalente a provocar una sobredosis fatal a toda la población del estado de Florida".
“El trabajo de la Guardia Costera de EE UU, en asociación con nuestras agencias federales, el Departamento de Defensa y socios internacionales, representa una victoria significativa en la lucha contra las organizaciones criminales transnacionales”, dijo el contralmirante Adam Chamie, comandante del Distrito Sureste.
El capitán John B. McWhite, oficial al mando del Hamilton, destacó que en los últimos meses la tripulación logró interceptar 11 embarcaciones rápidas, detener a 34 presuntos narcotraficantes e incautar un récord de 47,000 libras de cocaína.
“El compromiso y sacrificio de nuestros miembros desplegados y sus familias, que renuncian a tiempo juntos por la protección de nuestra nación, deben ser celebrados”, afirmó.
El contrabando incautado fue resultado de 19 interdicciones en aguas internacionales del Pacífico Oriental y el Caribe, producto de la coordinación interinstitucional e internacional que, según datos de la propia Guardia Costera, permite interceptar hasta el 80% de la droga en alta mar.
Estados Unidos también mantiene un despliegue militar estratégico rumbo a Venezuela, en el marco de su lucha contra el tráfico ilícito de drogas.
Operación Pacific Vipe tras los resultados
Los resultados informados hoy por Estados Unidos forman parte de la Operación Pacific Viper, que busca contener el flujo de narcóticos desde Sudamérica hacia Estados Unidos.
Esta operación fue lanzada recientemente por el Departamento de Seguridad Nacional de EE UU como parte de un esfuerzo para incrementar significativamente la presencia operativa en el Pacífico oriental, con el fin de cortar los flujos de droga y tráfico humanos antes de que lleguen a las costas estadounidenses.
El Pacífico Oriental llamado también "corredor del narcotráfico" es la franja del Océano Pacífico que se encuentra frente a la costa oeste de América, desde California y México hasta Centroamérica y Sudamérica.
En términos operativos para la Guardia Costera de EE UU, cuando hablan de “operaciones en el Pacífico Oriental” se refieren al área marítima que va aproximadamente desde las costas de Baja California, México, hasta las de Perú y Ecuador, incluyendo zonas estratégicas como: El Mar de Cortés y la costa del Pacífico mexicano (Acapulco, Manzanillo, Mazatlán).
También abarca el corredor marítimo frente a Centroamérica (Honduras, Guatemala, El Salvador, Costa Rica, Panamá). Además, las aguas internacionales frente a Colombia, Ecuador y Perú, que son puntos clave de salida de cocaína hacia el norte. Y áreas insulares de control como las Islas Galápagos y la Isla Clipperton.
Esta región es considerada un “corredor del narcotráfico” porque por allí transitan la mayoría de las embarcaciones rápidas (go-fast boats) y semisumergibles cargados con cocaína, antes de desviarse hacia el Caribe o directamente a México y Estados Unidos.
En esta región, la Guardia Costera de Estados Unidos desplegó grandes activos militares, por ejemplo, cortadores de primera línea, es decir, buques más grandes, modernos y mejor equipados de la flota, diseñados para operar en alta mar durante largas misiones. Estos navíos suelen ser buques de entre 210 y 418 pies (64–127 metros) de eslora, capaces de navegar miles de millas sin reabastecimiento.
También helicópteros Hitron equipados con francotiradores, equipos de abordaje policial y aeronaves de patrulla de larga duración.
Estas acciones forman el núcleo de la estrategia reciente de la Guardia Costera en alta mar, enfocada en frenar el narcotráfico antes de que afecte al territorio estadounidense.
Además, están vinculadas a las investigaciones de la Operación Pacific Viper bajo un enfoque de inteligencia y trabajo conjunto entre agencias.
El Cutter Hamilton, uno de los cuatro buques de seguridad nacional clase Legend con base en Charleston, Carolina del Sur, se ha convertido en pieza clave de estas operaciones que, además de negar más de medio billón de dólares en ingresos ilícitos a los carteles, aportan pruebas e inteligencia para su persecución judicial.
Las acciones contra el narcotráfico en altamar son resultado también de los esfuerzos de la Fuerza de Tarea Panama Express (Panama Express Strike Force — PANEX).
Esta es una iniciativa multidisciplinaria liderada por la Organized Crime Drug Enforcement Task Force (OCDETF) desde Tampa, Florida, bajo un enfoque impulsado por procuradores, inteligencia y trabajo multiagencial.
Entre sus miembros participantes están: ICE HSI, el Coast Guard Investigative Service, DEA, FBI, la Oficina del Fiscal del Distrito Medio de Florida y autoridades internacionales como la Policía Nacional de Colombia y España, y la Guardia Costera de España.
Un operativo emblemático se realizó el 9 de abril de 2025, cuando el Cutter James descargó en Port Everglades más de 44 550 libras de cocaína y 3 880 libras de marihuana (valoradas en cerca de $510 millones), como parte de una serie de 11 interdicciones y 34 detenidos, vinculados a grandes carteles como Clan del Golfo, Sinaloa y CJNG.
ANEX permite interrumpir redes criminales de alto nivel, generando pruebas e inteligencia clave para desmantelarlas mediante procesos judiciales.