El canciller de Venezuela, Yván Gil, conversó por teléfono con su homólogo de Bielorrusia, Maksim Ryzhenkov, sobre las que considera como "acciones bélicas" de Estados Unidos, en medio del despliegue militar del país norteamericano en el Caribe que escaló con la orden de bloquear buques petroleros sancionados que salgan y entren de la nación suramericana.
"Durante la llamada, discutimos la creciente militarización y las acciones bélicas de Estados Unidos en el Caribe, recibiendo de Belarús (Bielorrusia) un firme respaldo y un rechazo categórico a los intentos de bloquear el comercio petrolero venezolano", dijo Gil en un mensaje publicado en Telegram.
Ambos funcionarios coincidieron, de acuerdo a Gil, en que estas acciones son contrarias a la Carta de las Naciones Unidas y al derecho al libre comercio y la navegación.
En esta jornada, el canciller venezolano también conversó telefónicamente con sus homólogos de Mali y Sudáfrica, Abdoulaye Diop y Ronald Lamola, respectivamente, sobre la coyuntura política y social de estas naciones, así como de la situación geopolítica del Caribe.
El martes, el presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, aseguró que las puertas de su país están abiertas para el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, si este desea abandonar su país.
No obstante, Lukashenko, considerado el último dictador de Europa, matizó, en una entrevista con el canal estadounidense Newsmax TV, difundida por la agencia estatal bielorrusa BELTA, que "este tema, sinceramente hablando, jamás ha sido abordado".
El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, evitó responder este viernes si la Administración de Donald Trump busca sacar a Nicolás Maduro del poder en Venezuela y afirmó que la estrategia es proteger "los intereses" de Estados Unidos.
"Tenemos a un régimen ilegítimo que coopera abiertamente con terroristas que amenazan la seguridad de Estados Unidos", afirmó Rubio en una rueda de prensa de fin de año en el Departamento de Estado.
En una entrevista con NBC News publicada este viernes, Trump afirmó que no descarta la posibilidad de una guerra con Venezuela y se negó a confirmar si el objetivo final de su estrategia con ese país es derrocar a Maduro.
Trump ordenó el martes bloquear la entrada y salida de Venezuela de todos los petroleros sancionados por Estados Unidos, una semana después de haber incautado un barco cargado con crudo cerca de las costas venezolanas.
Estados Unidos aumentó así la presión sobre el Gobierno de Maduro, al que acusa de liderar el Cartel de los Soles, un grupo presuntamente ligado al narcotráfico y que el Departamento de Estado designó como organización terrorista extranjera, algo que Caracas niega,, tras meses de bombardeos a supuestas lanchas pertenecientes al narcotráfico en el Caribe y el Pacífico.