“Sería una tragedia que la cultura acabe en puro entretenimiento”. Esta aseveración la ha hecho Mario Vargas Llosa, el novelista peruano autor de un sinnúmero de novelas y galardonado con el premio Nobel de Literatura. El resultado de las encuestas referentes a nuestro país, descubre que el número de lectores actualmente es bajo y como consecuencia, también ha disminuido la circulación de libros y algunas librerías han cerrado sus puertas. Esta situación ha sido revelada en la reciente exposición de libros que anualmente se realiza en la capital por un corto período, apenas de una semana.
En una entrevista efectuada a Vargas Llosa por Daniel Mordzinski, el escritor expresó su criterio que la editorial Alfaguara lo editó con el título “La civilización del espectáculo”. En la mencionada entrevista, el escritor peruano describe la situación actual respecto a la lectura, la cual está implicada porque las personas en general leen menos y como lo ha afirmado el escritor, “no hay manera de saber qué cosa es cultura, todo es y ya nada es.” Respecto a la pregunta de que la cultura se ha banalizado, que triunfa la frivolidad, que el erotismo se pierde en beneficio de la pornografía, la respuesta del premio Nobel es que existen algunos aspectos sobre los que es necesario meditar. En efecto, debe considerarse que se han dado grandes transformaciones históricas y tanto China como la Unión Soviética han entrado en un proceso de desarrollo en todos los niveles científicos y culturales. Debe tomarse en cuenta que “no todos pueden ser cultos de la misma manera, y no todos tendrían que ser cultos”. El autor considera que sería una tragedia que en una época de progreso tecnológico y científico extraordinario, “la cultura vaya a convertirse en un puro entretenimiento, en algo superficial, dejando un vacío que nada pueda llenar”. En efecto, Vargas dice que nada puede reemplazar a la cultura en dar un sentido más profundo, trascendente, espiritual a la vida.” Respecto al erotismo, el novelista peruano contesta en la entrevista: “Yo no creo que el erotismo nazca simplemente de una experiencia pragmática del sexo, ni muchísimo menos. Creo que es la cultura, que son las artes, el refinamiento de la sensibilidad que produce la alta cultura, la que crea el erotismo.” Menciona a George Bataille que defendió el erotismo “como una manifestación de civilización reticente a la permisividad total”.
Respecto al periodismo, el escritor peruano manifiesta que “la cultura empuja a la prensa a la chismografía y hace de ella un elemento central… Los periódicos más serios tratan de resistir pero en un momento dado, si la supervivencia está en juego, se tiene que hacer concesiones… “El origen no está en los periódicos, lo está en la cultura reinante que impone la frivolidad y el amarillismo.” Respecto a la religión, manifiesta que ella debe ocupar el espacio que le es propio y es indispensable para que una sociedad sea verdaderamente democrática y libre, “en la que se pueda coexistir en la diversidad. (HOY)
