Tegucigalpa, Honduras.
Las consejeras del Consejo Nacional Electoral (CNE), Cossette López Osorio y Ana Paola Hall, denunciaron este lunes públicamente la existencia de una estrategia orientada a paralizar el escrutinio especial y evitar la emisión de la declaratoria oficial de resultados electorales.
A través de un comunicado oficial divulgado este lunes en la cuenta de X de López Osorio, las funcionarias advirtieron que el escrutinio especial es un mecanismo estrictamente regulado por la Ley Electoral y que su ejecución corresponde de forma exclusiva a las Juntas Especiales de Verificación y Recuento (JEVR), integradas por personas propuestas y acreditadas por los partidos políticos.
“El CNE no tiene atribuciones para realizar directamente el escrutinio especial ni para delegarlo en terceros”, señala el documento, en el que se precisa que el rol del órgano electoral se limita a la disposición logística, administrativa y de acompañamiento técnico, conforme al marco legal vigente.
Según el pronunciamiento, durante el desarrollo del proceso un porcentaje significativo de miembros de las JEVR incurrió en conductas deliberadamente dilatorias y obstructivas, contrarias al Protocolo de Escrutinios Especiales, a la Ley Electoral, a la Constitución de la República y al principio democrático.
📍COMUNICADO
— Cossette López-Osorio (@CossetteOficial) December 29, 2025
Lunes 29 de diciembre 2025 pic.twitter.com/HYDXSCbb96
Entre las acciones denunciadas figuran la paralización injustificada de labores, tiempos excesivos para el procesamiento de actas, anulaciones sin causa legal y hechos de violencia dentro de instalaciones institucionales, lo que, según las consejeras, lesionó gravemente el desarrollo normal del proceso electoral.
En relación con la declaratoria, López Osorio y Hall sostienen que estos hechos no son aislados, sino parte de un patrón sistemático y coordinado orientado a impedir la emisión oficial de resultados y forzar una eventual repetición de las Elecciones Generales de 2025, generando un escenario de incertidumbre y desestabilización institucional.
“El Consejo Nacional Electoral no permitirá, bajo ninguna circunstancia, que se fracture el orden constitucional ni que se desconozca la voluntad popular expresada en las urnas”, enfatiza el comunicado.
Las consejeras también fijaron posición frente a la Comisión Permanente del Congreso Nacional, señalando que cualquier pronunciamiento sobre el proceso electoral o sobre la actuación de las consejeras excede sus atribuciones constitucionales y constituiría una injerencia indebida en la función electoral, dado que el CNE se encuentra dentro del plazo legal para emitir la declaratoria.
Respecto al Ministerio Público, las funcionarias aseguraron que han actuado en defensa del sistema democrático hondureño y recordaron que, conforme al principio de legalidad, cualquier actuación en su contra debe enmarcarse en los procedimientos constitucionales. Advirtieron que mientras no se agote un eventual proceso de juicio político, el ente acusador no está facultado para ejercer acción penal.
El comunicado también responsabiliza a determinados partidos políticos de pervertir el diseño del sistema electoral mediante el uso indebido de las JEVR, acreditando personas que, en lugar de cumplir la función legal asignada, habrían actuado deliberadamente para paralizar y distorsionar el escrutinio especial.
Además, Cossette López y Ana Paola Hall hicieron un llamado a los partidos políticos, a las misiones de observación nacional e internacional y al pueblo hondureño a mantenerse vigilantes ante cualquier nuevo atentado contra el proceso electoral, reiterando que el CNE no permitirá que se desconozca la voluntad soberana expresada en las urnas.