Managua.
Tras varios días de tímidas manifestaciones, de miedo confeso y de temor a las acciones del Gobierno, los nicaragüenses recuperaron ayer su lugar en las calles de Managua y León, adonde unas 20,000 personas volvieron a exigir la renuncia del presidente Daniel Ortega, quien proclamó en varias ocasiones su “victoria” frente a sus oponentes.
Pero la contramarcha organizada por el sandinismo a la misma hora y en un lugar cercano a la de los autoconvocados, en la que participaron unas cinco mil personas en apoyo a la continuidad del Presidente, no amilanó a los capitalinos anti-Gobierno, quienes cuadruplicaron la cifra y recordaron al mandatario que la victoria será del pueblo.
“Dice (Ortega) que logró la victoria frente a nosotros, nos llama golpistas y terroristas, pero esos a quienes él insulta estamos aquí diciéndole que Nicaragua es de los nicaragüenses y la victoria será nuestra”, dijo Katya Guzmán, estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (Unan).
En Managua marcharon unas 15,000 personas y en León unas cinco mil, exigiendo la renuncia de Daniel Ortega como presidente.
Movimiento
La destitución de unos 40 médicos estatales que han atendido a personas que protestan contra el Gobierno de Daniel Ortega, en el noroeste de Nicaragua, agudizó ayer la crisis que ha dejado entre 295 y 448 muertos desde abril.
Las protestas contra Ortega y su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, comenzaron el 18 de abril pasado por unas fallidas reformas de la seguridad social, y aunque esas ya se anularon, ahora en las marchas exigen la renuncia del mandatario.
Tras varios días de tímidas manifestaciones, de miedo confeso y de temor a las acciones del Gobierno, los nicaragüenses recuperaron ayer su lugar en las calles de Managua y León, adonde unas 20,000 personas volvieron a exigir la renuncia del presidente Daniel Ortega, quien proclamó en varias ocasiones su “victoria” frente a sus oponentes.
Pero la contramarcha organizada por el sandinismo a la misma hora y en un lugar cercano a la de los autoconvocados, en la que participaron unas cinco mil personas en apoyo a la continuidad del Presidente, no amilanó a los capitalinos anti-Gobierno, quienes cuadruplicaron la cifra y recordaron al mandatario que la victoria será del pueblo.
“Dice (Ortega) que logró la victoria frente a nosotros, nos llama golpistas y terroristas, pero esos a quienes él insulta estamos aquí diciéndole que Nicaragua es de los nicaragüenses y la victoria será nuestra”, dijo Katya Guzmán, estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (Unan).
En Managua marcharon unas 15,000 personas y en León unas cinco mil, exigiendo la renuncia de Daniel Ortega como presidente.
Movimiento
La destitución de unos 40 médicos estatales que han atendido a personas que protestan contra el Gobierno de Daniel Ortega, en el noroeste de Nicaragua, agudizó ayer la crisis que ha dejado entre 295 y 448 muertos desde abril.
Las protestas contra Ortega y su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, comenzaron el 18 de abril pasado por unas fallidas reformas de la seguridad social, y aunque esas ya se anularon, ahora en las marchas exigen la renuncia del mandatario.