Los republicanos dijeron ayer que el proyecto del presidente estadounidense Barack Obama para aumentar los impuestos a los multimillonarios podría originar una lucha de clases.
El mandatario debe confirmar este día en un discurso en la Casa Blanca su intención de elevar el impuesto sobre la renta a los millonarios proporcionalmente a lo que paga la clase media.
El discurso ha sido bautizado la “Norma Buffett”, por su inspirador, el multimillonario Warren Buffett, que dijo recientemente que paga menos impuestos que su secretaria. “Si él se siente culpable, debe enviar un cheque”, bromeó ayer el líder de la minoría republicana en el Senado, Mitch McConnell. “No queremos paralizar la economía aumentando los impuestos”, dijo.
Para el senador Lindsey Graham, un republicano de Carolina del Norte, el aumento de los impuestos a los millonarios “reportará un mínimo de dinero al Tesoro para pagar deuda”.
“El código tributario debe ser reformado con el único fin de crear puestos de trabajo. Cuando un impuesto afecta al 1% de la economía, eso se llama una guerra de clases”, resaltó Graham.
El expresidente de EUA, Bill Clinton, instó ayer al Congreso a concentrarse en la creación de empleo para impulsar la economía antes de recortar el déficit.
Destacó que el problema del déficit del país, una de las grandes prioridades de los congresistas republicanos, podría esperar aún uno o dos años. El exmandatario demócrata aplaudió el plan de creación de empleo de Obama, cuyo valor es de 447,000 millones de dólares y que se apoya en reducciones de impuestos e inversiones en obras públicas.