Jerusalén, Israel.
El Ejército israelí halló ayer cerca de la ciudad palestina de Hebrón los cadáveres de los tres estudiantes de una escuela religiosa desaparecidos el pasado 12 de junio en Cisjordania. El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, acusó al movimiento islamista Hamas del asesinato.
En un comunicado enviado a los medios poco antes de reunirse con su gabinete de Seguridad, el jefe del Gobierno israelí advirtió que el movimiento islamista “pagará” por lo que ha hecho y dijo que exigirá también responsabilidades a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) por su acuerdo de reconciliación con Hamas.
El movimiento islamista afirmó, por su parte, que hará responsable a Israel de cualquier escalada de violencia y advirtió a Netanyahu de que “abrirá las puertas del infierno” si emprende una guerra contra Gaza.
“Los ocupantes serán plenamente responsables de cualquier futura escalada”, afirmó el portavoz de Hamas en Gaza, Sami Abu Zuhri.
Inician ataques
La aviación israelí bombardeó anoche con gran intensidad diversas posiciones en Gaza, pocas horas después de que fueran hallados los cuerpos sin vida de los tres estudiantes judíos. Testigos indicaron que cazabombarderos israelíes atacaron una veintena de objetivos militares del grupo radical palestino “Yihad Islámica” y del movimiento islamista Hamas, al que Israel acusa del asesinato y secuestro de los jóvenes.
Entre los lugares alcanzados, los testigos citaron presuntos arsenales del brazo armado de Hamas y terrenos desde donde se lanzan cohetes contra Israel.
Entretanto, el ejército israelí destruyó ayer por la noche las casas de los dos principales sospechosos del secuestro de los adolescentes.
La vivienda de Marwane Qawasmeh y Amer Abu Eisheh, miembros de Hamas en Hebrón, fueron destruidas con explosivos, precisaron testigos.
Los milicianos palestinos respondieron disparando desde Gaza un cohete contra el sur de Israel sin causar víctimas.
Condolencias
La muerte de los tres jóvenes fue condenada por los gobiernos de varios países, entre ellos Francia, el Reino Unido e Italia, y también el Vaticano, que transmitieron sus condolencias a las familias.
Por su parte el presidente Barack Obama, también condenó el asesinato de los adolescentes. “Estados Unidos condena en los términos más fuertes posibles este acto de terrorismo insensato cometido contra jóvenes inocentes”, declaró el presidente en un comunicado.
El mandatario expresó sus más “profundas y sentidas condolencias” a las familias de Eyal Yifrach, Gilad Shaar, y Naftali Fraenkel. Este último tenía la doble ciudadanía: israelí y estadounidense.
Entretanto, el presidente palestino condenó el secuestro, pero Netanyahu responsabilizó de forma indirecta a su nuevo Gobierno unitario, al que culpó de haber “abierto la puerta” de Cisjordania a Hamas. La desaparición de los chicos se vivió con considerable emotividad pública en Israel.
El Ejército israelí halló ayer cerca de la ciudad palestina de Hebrón los cadáveres de los tres estudiantes de una escuela religiosa desaparecidos el pasado 12 de junio en Cisjordania. El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, acusó al movimiento islamista Hamas del asesinato.
En un comunicado enviado a los medios poco antes de reunirse con su gabinete de Seguridad, el jefe del Gobierno israelí advirtió que el movimiento islamista “pagará” por lo que ha hecho y dijo que exigirá también responsabilidades a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) por su acuerdo de reconciliación con Hamas.
El movimiento islamista afirmó, por su parte, que hará responsable a Israel de cualquier escalada de violencia y advirtió a Netanyahu de que “abrirá las puertas del infierno” si emprende una guerra contra Gaza.
“Los ocupantes serán plenamente responsables de cualquier futura escalada”, afirmó el portavoz de Hamas en Gaza, Sami Abu Zuhri.
Inician ataques
La aviación israelí bombardeó anoche con gran intensidad diversas posiciones en Gaza, pocas horas después de que fueran hallados los cuerpos sin vida de los tres estudiantes judíos. Testigos indicaron que cazabombarderos israelíes atacaron una veintena de objetivos militares del grupo radical palestino “Yihad Islámica” y del movimiento islamista Hamas, al que Israel acusa del asesinato y secuestro de los jóvenes.
Entre los lugares alcanzados, los testigos citaron presuntos arsenales del brazo armado de Hamas y terrenos desde donde se lanzan cohetes contra Israel.
Entretanto, el ejército israelí destruyó ayer por la noche las casas de los dos principales sospechosos del secuestro de los adolescentes.
La vivienda de Marwane Qawasmeh y Amer Abu Eisheh, miembros de Hamas en Hebrón, fueron destruidas con explosivos, precisaron testigos.
Los milicianos palestinos respondieron disparando desde Gaza un cohete contra el sur de Israel sin causar víctimas.
Condolencias
La muerte de los tres jóvenes fue condenada por los gobiernos de varios países, entre ellos Francia, el Reino Unido e Italia, y también el Vaticano, que transmitieron sus condolencias a las familias.
Por su parte el presidente Barack Obama, también condenó el asesinato de los adolescentes. “Estados Unidos condena en los términos más fuertes posibles este acto de terrorismo insensato cometido contra jóvenes inocentes”, declaró el presidente en un comunicado.
El mandatario expresó sus más “profundas y sentidas condolencias” a las familias de Eyal Yifrach, Gilad Shaar, y Naftali Fraenkel. Este último tenía la doble ciudadanía: israelí y estadounidense.
Entretanto, el presidente palestino condenó el secuestro, pero Netanyahu responsabilizó de forma indirecta a su nuevo Gobierno unitario, al que culpó de haber “abierto la puerta” de Cisjordania a Hamas. La desaparición de los chicos se vivió con considerable emotividad pública en Israel.