29/04/2024
12:34 AM

Macron promete reconstrucción de icónica catedral de Notre Dame

Macron prometió la reconstrucción del icónico edificio de la historia francesa y europea. Autoridades creen que obras de restauración provocaron el siniestro.

París.

Francia se despierta de una sus peores pesadillas luego de que un voraz incendio arrasara con gran parte de la icónica catedral de Notre Dame, sumiendo a la capital francesa en una espesa cortina de humo.

El fuego, que se declaró a alrededor de las 18H50 (16H50 GMT), se propagó rápidamente a toda la estructura superior del edificio de casi mil años de antigüedad, provocando el derrumbe de la aguja.

Los bomberos consiguieron salvar “la estructura” del emblemático templo y hasta anoche seguían luchando contra el incendio que redujo a cenizas buena parte del tejado y tuvo al mundo en ascuas durante horas. “Reconstruiremos” la catedral, prometió el presidente Emmanuel Macron. “Se ha evitado lo peor, aunque todavía no hemos ganado la batalla totalmente”, añadió el mandatario francés, visiblemente emocionado, antes de agradecer a los bomberos por haber salvado las dos torres y la fachada del monumento.

El feroz incendio provocó el derrumbe de la aguja de la catedral, sumiendo a los parisinos en shock y conmoción.
Podemos considerar que la estructura está a salvo y preservada en su globalidad”, informó por su parte el comandante de la brigada de bomberos de París, Jean-Claude Gallet.

Era la noticia que toda la ciudad esperaba con el corazón en un puño tras ver las impresionantes imágenes de las llamas devorando el edificio.

El fuego bajó de intensidad”, declaró el secretario de Estado de Interior Laurent Núñez, muy aliviado. Poco antes había dicho que no estaba seguro de que se pudiera “frenar la propagación en la torre norte”.

Se desconoce el origen del fuego, que consumió el techo de madera de más de 100 metros de longitud, conocido como “el bosque” por el gran número de vigas que hubo que utilizar para instalarlo.

Destrucción. Los bomberos indicaron que el incendio está “potencialmente ligado” a las obras y la fiscalía abrió una investigación judicial por “destrucción involuntaria”. Los investigadores privilegian la pista de un incendio accidental.

La enorme nube de humo visible a kilómetros de distancia envolvió el monumento, en el inicio de la Semana Santa.

En poco más de una hora el fuego echó abajo la aguja de 93 metros de alto, uno de los símbolos de París, provocando un grito de horror entre la muchedumbre agolpada en los puentes del Sena y en las calles adyacentes.

Con su caída desaparece una parte de la historia de la Ciudad Luz. “París está desfigurada. La ciudad nunca volverá a ser como antes”, lamentaba Philippe, un francés de unos 30 años.

“Todo está siendo devorado por las llamas”, lamentó el portavoz de la catedral gótica, André Finot, que llegó a temer por la estructura, que data del siglo XIX de un lado y del XIII del otro.

Alrededor de 400 bomberos se movilizaron con 18 mangueras tras descartar el uso de aviones cisterna para evitar que la presión del agua provocara un colapso del monumento.

El difícil acceso a la isla fluvial en la que está enclavada la catedral, rodeada por las aguas del Sena, dificultó la labor de los bomberos, que se centraron en evitar que el fuego dañara la estructura y provocara el derrumbe del monumento, en particular de la torre norte.

Tras el incendio que desfiguró el panorama de París, los franceses lloran una de sus más bellas catedrales, a la vez un “símbolo vivo” de su fe y un lugar de “reconciliación” con otras culturas. Notre Dame, edificada entre 1163 y 1345, es uno de los templos más reconocidos del mundo.
Reconstrucción. La alcaldía de París puso en marcha una operación para “salvar todas las obras de arte”.

La corona de espinas y la túnica de San Luis, dos de las reliquias más importante, están a buen resguardo, afirmó monseñor Patrick Chauvet, el rector de la catedral.

Restaurar el edificio llevará “años de obras” y costará varios miles de millones de euros, estimó el nuevo presidente la Conferencia Episcopal de Francia, Eric de Moulins-Beaufort.

Una parte de la isla de la Cité, el barrio donde está ubicada la catedral, fue evacuada.

Por la noche, cientos de personas se reunieron para rezar en el Pont aux Changes, situado frente al monumento.

Informado de la catástrofe, el presidente Macron anuló el discurso previsto para anunciar medidas frente a la crisis de los “chalecos amarillos” y acudió al lugar del siniestro.

Emoción de toda una nación. Pensamientos para todos los católicos y para todos los franceses. Como todos nuestros compatriotas estoy triste esta noche de que se queme esta parte de nosotros”.

La catedral, con alrededor de 13 millones de visitantes al año, es el monumento histórico más frecuentado de Europa y uno de los más reconocidos tras ser inmortalizado por Victor Hugo en “El jorobado de Notre Dame”.

Condolencias. Varios líderes mundiales manifestaron su consternación, entre ellos el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que calificó el lunes como “horrible” y sugirió a las autoridades francesas desplegar aviones cisterna para combatir las llamas.

El presidente de España, Pedro Sánchez, también expresó su solidaridad por esta “catástrofe”.

“Las llamas arrasan 850 años de historia, de arquitectura, de pintura, de escultura. Será difícil olvidarlo. Francia puede contar con nosotros para recuperar la grandeza de su

patrimonio”, dijo en un tuit.

La canciller alemana, Angela Merkel, expresó también su tristeza por este siniestro en Notre Dame, “un símbolo de Francia y de nuestra cultura europea”.