El hondureño Luis Banegas Rodríguez , de 25 años, fue sentenciado a 27 meses de cárcel en Estados Unidos tras declararse culpable de conspiración para cometer fraude bancario en dos casos distintos, informó el fiscal federal interino M. Scott Proctor.
La sentencia fue dictada por el juez Philip P. Simon , de la Corte del Distrito Norte de Indiana . Además de la pena de prisión, Banegas Rodríguez deberá cumplir un año de libertad supervisada y pagar 533,043 dólares en restitución a las víctimas.
De acuerdo con los documentos judiciales, el 11 de enero de 2023, Banegas Rodríguez y sus cómplices utilizaron identificaciones falsas para cobrar 169 cheques fraudulentos por un total de 233,569 dólares en tres sucursales de un mismo banco en el Distrito Norte de Indiana. Los cheques aparentaban haber sido emitidos por una empresa de producción lechera en esa región.
Casi seis meses después, el 23 de junio de 2023, el grupo volvió a actuar en el Distrito Este de Oklahoma, donde cobraron 178 cheques falsos que sumaron 299,474 dólares. En esta ocasión, los documentos falsificados simulaban provenir de una compañía de suministros para la construcción. Las operaciones se realizaron en cinco sucursales bancarias y tres casas de cambio.
“Banegas Rodríguez participó en una conspiración de gran alcance que causó daños financieros significativos a bancos comunitarios y pequeñas empresas en todo Estados Unidos. Gracias a la colaboración constante entre agencias federales, estatales y locales, Banegas Rodríguez fue llevado ante la justicia por su papel en este esquema”, declaró Proctor. “La sentencia impuesta envía un mensaje claro de que hay consecuencias reales por cometer fraude, especialmente en el noroeste de Indiana”.
Por su parte, Matthew J. Scarpino, agente especial a cargo de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) en Chicago, advirtió que este tipo de delitos no quedará impune: “Las acciones ilícitas de conspiradores que cometen fraude bancario mientras viajan por Estados Unidos no serán toleradas. HSI continuará trabajando con otras agencias de seguridad para desmantelar a estos delincuentes y responsabilizarlos por sus crímenes”.
La investigación de los casos estuvo a cargo de HSI, el Buró Federal de Investigaciones (FBI), el Servicio Secreto de Estados Unidos y la Policía Estatal de Indiana, con apoyo del Departamento de Policía de Poteau (Oklahoma), la Oficina del Sheriff y la Fiscalía del condado de Benton (Indiana), así como del Departamento de Policía de Houston (Texas).
Los casos fueron procesados por los fiscales federales Steven J. Lupa (Distrito Norte de Indiana) y Kara Traster y Jordan Howanitz (Distrito Este de Oklahoma).