El presidente venezolano, Hugo Chávez, inició ayer en La Habana el segundo ciclo de sesiones de quimioterapia contra el cáncer que le afecta, un proceso que enfrenta con “ánimo inmejorable” por los buenos resultados de los últimos exámenes médicos, aseguró él desde Cuba.
“Comienzo ya la segunda fase de la quimioterapia para atacar cualquier amenaza de rebrote”, anunció el mandatario desde Cuba en un contacto telefónico con la televisora oficial venezolana VTV.
“Salí bien en los exámenes sanguíneos, funcionamiento de órganos, desde riñones hasta el hígado, el corazón; de electrocardiograma, ecocardiograma. Todo, todo salió bien y aquí estoy”, añadió el mandatario, que suele comunicarse constantemente desde Cuba con los medios oficiales venezolanos.
Chávez está recuperando peso y masa muscular y además ostenta un “ánimo inmejorable”, según contó a la televisora.
De buen ánimo
“Gracias a Dios, a la Virgen, a los espíritus de la sabana y a estas ganas infinitas de vivir, todos mis órganos funcionan bien”, insistió el Presidente, que siempre se ha declarado un ferviente católico.
Chávez regresó la noche del sábado a La Habana para continuar el tratamiento contra el cáncer que le fue detectado en junio durante una visita a la isla y que motivó una cirugía el 20 de ese mes para extirparle un tumor maligno en la zona pélvica.
El mandatario ya recibió un primer ciclo de sesiones de quimioterapia a mediados de julio también en Cuba, con cuyo Gobierno mantiene estrechas relaciones políticas. Venezuela es el principal socio comercial y político de la isla.
El líder cubano Fidel Castro, retirado del poder desde julio de 2006 por una enfermedad, sigue personalmente la evolución del tratamiento del mandatario venezolano, quien lo considera un “padre político”.