Caracas, Venezuela.
Pese a la crisis económica y la escasez de alimentos en Venezuela, es el retiro de las imágenes del fallecido expresidente Hugo Chávez de la Asamblea Nacional (AN), ahora controlada por la oposición, lo que se ha convertido en un debate nacional.
Tanto así que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, hizo una aparición conjunta con generales de las Fuerzas Armadas en el Cuartel de la Montaña, adonde reposa el cuerpo de Chávez, para mostrar su indignación por la orden del jefe del Parlamento, el acérrimo opositor Henry Ramos.
“Es el más grave ultraje que jamás se ha cometido en la historia de 200 años contra la memoria de Bolívar”, dijo Maduro.
A la vez, los altos mandos de la Fuerza Armada de Venezuela anunciaron su rotundo apoyo al Presidente en medio del conflicto entre el Gobierno y el Parlamento que desató en el país una crisis institucional.
Ante Maduro, el gabinete ministerial y cientos de soldados, el general en jefe de la institución castrense y ministro de Defensa, Vladimir Padrino, reiteró a Maduro la “absoluta lealtad” e “irrestricto apoyo” de los militares, a la vez que condenó el acto opositor.
“Se ha ultrajado el honor militar”, aseveró Padrino con gesto adusto, al calificar el desmonte de los paneles, afiches y cuadros como un “acto decadente y ominoso”.
Pese a la crisis económica y la escasez de alimentos en Venezuela, es el retiro de las imágenes del fallecido expresidente Hugo Chávez de la Asamblea Nacional (AN), ahora controlada por la oposición, lo que se ha convertido en un debate nacional.
Tanto así que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, hizo una aparición conjunta con generales de las Fuerzas Armadas en el Cuartel de la Montaña, adonde reposa el cuerpo de Chávez, para mostrar su indignación por la orden del jefe del Parlamento, el acérrimo opositor Henry Ramos.
“Es el más grave ultraje que jamás se ha cometido en la historia de 200 años contra la memoria de Bolívar”, dijo Maduro.
A la vez, los altos mandos de la Fuerza Armada de Venezuela anunciaron su rotundo apoyo al Presidente en medio del conflicto entre el Gobierno y el Parlamento que desató en el país una crisis institucional.
Ante Maduro, el gabinete ministerial y cientos de soldados, el general en jefe de la institución castrense y ministro de Defensa, Vladimir Padrino, reiteró a Maduro la “absoluta lealtad” e “irrestricto apoyo” de los militares, a la vez que condenó el acto opositor.
“Se ha ultrajado el honor militar”, aseveró Padrino con gesto adusto, al calificar el desmonte de los paneles, afiches y cuadros como un “acto decadente y ominoso”.
Protestas
Ramos Allup justificó su decisión señalando que había reparado “un abuso”, pues según él nunca antes la imagen de un ex-Presidente había copado el palacio legislativo.
El Gobierno organizó una manifestación de “desagravio” en la Plaza de Bolívar, adonde fueron colocados todos los cuadros retirados del Parlamento, a la vez que anunció que llenará los espacios públicos de Caracas con imágenes de Chávez y Bolívar.
“¡A Chávez no se le toca!”, dijo un hombre en la concentración. “Están jugando con candela; si siguen así, vamos a ver una guerra acá”, declaró otro chavista.
