El albañil desempleado Luigi Preiti hirió de bala ayer a dos policías italianos en una concurrida plaza cuando el primer ministro Enrico Letta y sus ministros tomaban posesión del nuevo gobierno de Italia, informaron las autoridades.
El blanco del atacante eran los políticos, pero como no encontró a ninguno en la plaza disparó contra los carabineros, dijo a la prensa el fiscal de Roma, Pierfilippo Laviani, que citó las palabras del agresor detenido.
Además de la recesión y un desempleo galopante, Italia afronta una parálisis política desde los comicios de febrero que no concluyeron con un ganador definido. Han persistido fuertes tensiones políticas entre los electores, divididos entre los partidos centroizquierdistas, conservadores y antigubernamentales.
En teoría, ayer sería un día de esperanza porque finalmente la endeudada nación tendría un nuevo Gobierno que obre para superar los diversos problemas que la afectan.
Sin embargo, los disparos retumbaron en la Plaza de Colonna, cerca de una concurrida zona comercial y de paseo poco después de las 11:30 am, exactamente la hora en que el primer ministro Letta juraba su cargo en el palacio presidencial del Quirinal, a un kilómetro (poco más de media milla) de distancia.
Los invadió el pánico
El atacante armado, que vestía traje oscuro, fue sometido de inmediato contra el piso por otros policías afuera del Palacio de Chigi, que alberga el despacho del primer ministro y otras oficinas de gobierno.
Los nuevos ministros se dirigieron después a este palacio para su primera reunión del gabinete.
Laviani identificó al presunto agresor como Luigi Preiti (49), oriundo de Calabria, zona agrícola del sur azotada por el crimen organizado y un desempleo crónico.
El tiroteo causó pánico entre los turistas y los residentes que se encontraban en la plaza, cuyo atractivo principal es una columna elevada que data del siglo II de la antigua Roma y que fue erigida en honor del emperador Marco Aurelio. Roma estaba ayer atestada de gente que disfrutaba la última jornada de un fin de semana de cuatro días.
No está loco
Fanuel Morelli, camarógrafo de The Associated Press Television, dijo que estaba asombrado de la actitud firme y tranquila del individuo armado.
“Cuando escuché el primer disparo volteé y vi a un hombre parado a unos 15 metros (50 pies) de donde me encontraba. Extendió su brazo y vi que hizo otros cinco o seis disparos”, afirmó Morelli.
“Abría fuego contra el segundo carabinero, que se encontraba a unos cuatro metros (13 pies) frente a él”, apuntó.
Laviani dijo que Preiti, que fue hospitalizado con magulladuras, confesó su responsabilidad en el ataque y no parecía trastornado mentalmente.
“Es un hombre lleno de problemas, perdió su empleo, todo”, dijo el fiscal. “Estaba desesperado. En general, quería abrir fuego contra los políticos, pero, como no encontró a ninguno, disparó contra los carabineros (policías)”, apuntó.
Un policía baleado en el cuello se encontraba en condición crítica. El otro, con un disparo en una pierna, sufrió una fractura, de acuerdo con los médicos.
Una mujer embarazada que pasaba por el lugar durante el ataque a tiros tuvo heridas leves, dijo el alcalde de Roma. No quedó claro si la transeúnte sufrió el rasguño de alguna bala o si sus heridas fueron provocadas por el tumulto a causa del pánico, apuntó.
