18/04/2024
08:58 PM

Temer se entrega a la Policía tras una nueva orden de arresto en su contra

Un tribunal de segunda instancia ordenó que el expresidente brasileño regresara a prisión en un caso por corrupción.

Sao Paulo, Brasil.

El expresidente de Brasil Michel Temer, a quien un tribunal de segunda instancia ordenó regresar a prisión en un caso por corrupción, se presentó este jueves en la sede de la Policía Federal de la ciudad de Sao Paulo para ponerse a disposición de la Justicia.

El exmandatario (2016-2018), de 78 años, estuvo cuatro días tras las rejas luego de ser arrestado el pasado 21 de marzo por orden de un juez de Río de Janeiro y fue liberado entonces gracias a un hábeas corpus, pero tendrá que volver a prisión por una decisión tomada el miércoles por el Tribunal Regional de la Segunda Región (TRF-2).

El ex jefe de Estado se entregó a la Policía poco después de que una jueza le diera plazo para hacerlo hasta el final de la tarde de este jueves y tras haber prometido la víspera que se presentaría voluntariamente a la Justicia.

Lea más: Un tribunal determina que el expresidente brasileño Temer vuelva a prisión

El caso por el que Temer fue preso está relacionado con supuestos sobornos recibidos en 2014 a cambio de contratos de obras en la usina nuclear Angra 3, en el sur del estado de Rio.

El Ministerio Público Federal (MPF) investiga 'crímenes de corrupción, desvío de fondos y blanqueo de dinero', con 'pagos ilícitos' efectuados por un empresario 'para la organización criminal liderada por Michel Temer'.

La prisión preventiva se justifica, según el MPF, por la sospecha de que la presunta banda, que opera desde hace 40 años, sigue 'en plena actividad', y que habría 'obtenido la promesa, el pago o el desvío hacia la organización de 1.800 millones de reales' (unos 470 millones de dólares al cambio actual).

Lea más: López Obrador defiende su plan migratorio pese aumento de deportaciones

Temer, que asumió el poder de forma provisoria tras el impeachment de la expresidenta Dilma Rousseff, enfrenta unos seis procesos por corrupción. En marzo se convirtió en el segundo expresidente brasileño detenido desde el retorno de la democracia.