Altas expectativas y aires de un cambio real priman entre la mayoría de los distintos sectores de la sociedad civil luego de que por fin, en el cuarto intento, los diputados del Congreso Nacional escogieran a los 15 magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) 2023-2030.
Ahora, la comunidad nacional e internacional tiene sus ojos puestos en que los hombres y mujeres recién juramentados contribuyan con independencia judicial y que nunca se decanten por sus intereses ni de los grupos de poder en el país.
Hugo Maldonado, presidente del Comité para la Defensa de los Derechos Humanos en Honduras (Codeh), manifestó que “por fortuna terminó la incertidumbre esta noche, el cambio que hizo el Partido Liberal terminó esta repartición de cargos en la nueva Corte Suprema de Justicia, y esto le da estabilidad política al país, que tanto lo necesita.
Para saber
- La elección de los 15 nuevos magistrados de la Corte Suprema se llevó a cabo después de cuatro intentos fallidos desde enero por falta de consensos.
- Los 15 magistrados, para siete años, debían ser elegidos por una mayoría calificada de 86 votos de los 128 asientos del Parlamento, según la ley.
Ojalá la nueva Corte tome garantía de la seguridad jurídica y haga un papel diferente hasta lo hecho en este momento”.En tanto, el abogado constitucionalista Óliver Erazo recordó que “este fue un proceso complejo y llegar a consensos fue difícil porque ya no existe un Poder Legislativo bipartidista, hoy se trata de un tejido compuesto a nivel tripartidista”.
Juan Ángel López, portavoz de la Conferencia Episcopal, lamentó lo sucedido con la escogencia a lo interno del Legislativo.
“Cuando los que juraron lealtad a la patria y a su Constitución son más leales a un caudillo, del color que sea, el capricho vale más que la justicia, impera la incertidumbre, la ética es desterrada”.
En consonancia con lo anterior, el sacerdote jesuita Ismael Moreno aseguró que una vez elegida la nueva Corte Suprema de Justicia, el país caerá en un desafío mayor ante el control de las redes criminales.
Coordinador del Codeh
Hugo Maldonado:
“Ojalá la nueva corte suprema haga un papel diferente a lo hecho hasta ahora”.
“Esto hará que se levante con más fuerza la necesidad de tener la Comisión contra la Corrupción e Impunidad (Cicih), ya que sin ella la Corte Suprema y el Ministerio Público estarán en manos de bandidos”.
A la fecha son varios los grupos civiles que dudan sobre la voluntad política para instalar la Cicih, puesto que después de múltiples meses de negociación aún no se firma un memorándum de entendimiento con la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para su pronta instalación.
Transparencia y esperanza
Desempleo, pobreza e inseguridad siguen siendo los principales problemas de la población por sobre todas las cosas, recordó Gustavo Solórzano, asesor legal del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), al tiempo que cuestionó que a esto se suma la inestabilidad de la clase política, la cual durante varias semanas debatió la nueva Corte.
“Los políticos le han fallado al país y la incertidumbre no es buena para nadie, ahora necesitamos un Poder Judicial totalmente independiente”.
Sacerdote hondureño
Ismael Moreno:
“Nunca habrá verdadera democracia si no la sembramos en las periferias”.
El sector empresarial de Honduras insiste en que la nueva Corte es una oportunidad para construir un mejor país donde el Estado de derecho sea una realidad para todos, con un futuro lleno de esperanza y justicia.
Mientras tanto, Omar García, especialista en gobernanza y transparencia, aseguró que los nuevos magistrados tendrán que sujetarse a la Constitución de la República y soportar al máximo el hecho de obviar la agenda de los partidos políticos, quienes buscan un interés particular.
Experto en gobernabilidad
Omar García:
“Los tres partidos políticos ofrecieron una cortada suprema a la justicia en Honduras”.
“Los políticos piensan que dentro de unos años ya no irán a la cárcel por cometer delitos, entonces aquí jugará un papel importante la Cicih para marcar contrapeso. Por otro lado, considero que la extradición será uno de los temas a tratar fuertemente en su momento”, declaró.
Para el analista, la nueva Corte Suprema de Justicia no gozará de independencia judicial, pues es del criterio que no se escogió a los mejores, ya que dejaron por fuera a una de las mejores personas calificadas en la nómina, la abogada Ana Alejandrina Pineda, a quien también el Partido Salvador de Honduras le apostaba.
“No puedo creer que las personas que ahora eligieron sean las que van a beneficiar al país, aunque hay sus honrosas excepciones, pero es lamentable que hayan desechado a profesionales intachables”, cerró.
De su lado, diversos congresistas afirman que la elección de los nuevas magistraturas se traduce en un acuerdo histórico para los verdaderos cambios que necesita el país.
Honduras se sitúa frente a una alternativa de tener magistrados independientes para dar un paso hacia delante y que permita sanear el sistema de justicia, de lo contrario se corre el riesgo que se estanquen muchas de las leyes y no se garantice la independencia judicial anhelada.
