Robot sampedrano competirá contra otros de cinco países

San Pedro Sula, Hondras

El robot hondureño VPR, construido por estudiantes de la Universidad Tecnológica Centroamericana (Unitec) de San Pedro Sula, viajará el sábado a Lima, Perú, para demostrar sus capacidades logísticas ante un jurado y ganar una competencia mundial que pondrá en juego un premio de $10,000.

$10,000 Premio para el ganador. El segundo y tercer lugar recibirán $6,000 y $4,000 respectivamente. La competencia será en la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC).

VPR, creado por Luis José Oseguera, Kathya Marina Centeno, Rolando David Hernández y David Roberto Miselem, es una pequeña estructura (de aproximadamente 50 centímetros de ancho por 50 de alto), dotada de inteligencia artificial, que competirá ante 5 entidades electromecánicas creadas por universitarios de Perú, Turquía, Brasil, México y España.

Para asistir a Lima e ir tras el Premio Laureate a la Excelencia en Ingeniería Robótica, los creadores de VPR (voice picking robot) tuvieron que participar en la etapa de clasificación contra 22 proyectos presentados por igual número de universidades de la red internacional Laureate.

David Roberto Miselem, líder del grupo, explicó a LA PRENSA “que este es un robot para el área de logística y su función consiste en llevar cajas de un lugar a otro”.

Este año, la red de universidades Laureate convocó a los estudiantes a postular proyectos orientados a solventar problemas logísticos para el Premio Laureate a la Excelencia en Ingeniería Robótica.

En Lima (entre el 10 y 14 de septiembre), este robot tendrá que tomar y transportar cajas en una pista de 4 metros, además, deberá clasificarlas según los colores. Fotos: F. Muñoz

Según el Comité de Selección Interno de la red, los estudiantes tenían que “diseñar y programar robots que puedan ayudar a recuperar y clasificar piezas en una fábrica o almacén utilizando una plataforma móvil, tecnología de sensores e inteligencia artificial”.

Materiales Los estudiantes crearon piezas en impresoras 3D, adaptaron materiales locales e importaron algunos.

“Este proyecto consta de dos fases, la primera consistió en enviar el diseño. Nosotros enviamos una propuesta que resolviera la necesidad que ellos plantearon. Diseñamos el aparato en software de CAD (diseño asistido por computadora) y propusimos lo que iba a tener, cómo iba a funcionar, cómo iba a solventar los problemas, elaboramos un informe y lo mandamos. Todas las otras universidades hicieron lo mismo. Al mes, creo, nos dieron respuesta que habíamos clasificado como una de las seis universidades finalistas que estarán en Perú”, relató Miselem.

VPR funciona gracias a los algorítmos desarrollados por Rolando Hernández, quien es el experto en programación del grupo, creados en base a las necesidades detectadas por Kathya Centeno, quien pronto se graduará de ingeniera industrial.

Luis Oseguera, encargado del diseño CAD, recordó que, durante el proceso de creación, “el diseño del mecanismo de sujeción” se convirtió en el mayor desafío. “Tuvimos que hacer diez diseños del mecanismo que abre y ciera para tomar y sujetar la caja”, dijo.

José Luis Ordóñez, catedrático de mecatrónica y asesor de los creadores del VPR, destacó que “el grupo de estudiantes es balanceado, ha aprendido a trabajar en equipo y han desarrollado la capacidad para fabricar sus propias placas electrónicas”.