Tegucigalpa. Los aspirantes a la presidencia, en un foro organizado por la Federación de Organizaciones Privadas para el Desarrollo de Honduras (Foprideh), solicitaron que la Organización de Estados Americanos (OEA) apoyo para auditar y certificar resultados de comicios.
El organismo hemisferial se encargará de coordinar la auditoría internacional del Sistema Integrado de Escrutinio y Divulgación Electoral (Siede).
Las autoridades del Tribunal Supremo Electoral (TSE) formalizaron el planteamiento al secretario de Asuntos Políticos de la OEA, Kevin Casas-Zamora, y a su representante en Honduras, Claudia Barrientos.
La próxima semana vendrá al país el jefe de Misión, Enrique Corea, para ultimar detalles relacionados con los técnicos que mandará la entidad y los gastos que este trabajo implicará, informó el presidente del TSE, David Matamoros. “Lógicamente es un tema de recursos y técnicos, pero existen todas las opciones para que se busquen los fondos para eso, porque es importantísimo, ya no solo para Honduras sino para el mundo entero”, que se certifique la transmisión, dijo el magistrado presidente.
La OEA auditará “los sistemas, los programas y los mecanismos. Lo que se busca es certificar la transparencia y la calidad del sistema”, añadió Matamoros. El TSE decidió cambiar la Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP) por el Siede, que transmitirá imagen.
Por aparte, el TSE tendrá a su auditor internacional, Teodoro Dale, que tendrá bajo su responsabilidad detectar las inconsistencias en las actas originales de cierre y recomendar, cuando sea necesario, un recuento de votos. Para las elecciones primarias de 2012, Dale detectó más de ocho mil inconsistencias que tuvieron su origen en manipulación de actas por parte de los delegados de mesas, que constituyen la debilidad del sistema electoral hondureño.
Por otra parte, el Consejo Consultivo y el TSE acordaron instalar una sola red para la transmisión de las actas originales de cierre y una vez que estas ingresen al sistema serán reenviadas a los servidores de los partidos políticos para que lleven sus registros.
Algunos partidos aspiraban a que el TSE les instalara una red paralela, pero eso representaba un costo oneroso.