El fiscal general, Luis Rubí, dijo ayer que si el depuesto presidente, Manuel Zelaya, se va del país el próximo 27 de enero, no quedará libre de responsabilidad penal por los múltiples delitos que se le imputan.
Si abandona el país, no “queda liberado de las responsabilidades penales; él queda pendiente con los requerimientos y a la espera de que se presente a los tribunales para que responda sobre las acusaciones que el Ministerio Público le hace”, expresó Rubí.
Porfirio Lobo anunció ayer, miércoles, desde República Dominicana que cuando asuma el poder el 27 de enero, le concederá a Zelaya un salvoconducto para que pueda viajar con su familia y otros allegados al país caribeño.
Rubí indicó que después de que se le conceda el salvoconducto a Zelaya, el Ministerio Público hará el estudio correspondiente para ver si se cumplen las normas internacionales y el derecho interno hondureño.
“De no producirse eso, el Ministerio Público definitivamente tendrá que tomar acción en cuanto a esa resolución del Poder Ejecutivo”, precisó.
Rubí anunció ayer que se preparan más acusaciones contra Manuel Zelaya por actos de corrupción. Las acciones se incoarán una vez que la Fiscalía reciba del Tribunal Superior de Cuentas la totalidad de las evidencias de una auditoría practicada al Fhis. En el informe se desprenden hallazgos de un despilfarro de treinta millones de lempiras por la emisión de dos injustificados acuerdos de emergencia, y habrían sido utilizados en gastos de la cuarta urna.
