La pérdida de espuma aislante durante el despegue del transbordador Atlantis este sábado no parece ser una amenaza para la nave, informaron funcionarios de la NASA tras el lanzamiento.
El coordinador del lanzamiento Leroy Cain dijo que la espuma que se desprendió de los tanques externos de combustible de la nave lo hizo muy tarde como para ocasionar daños serios.
'Los primeros indicadores que notamos de pérdida de espuma aislante fue 4 minutos y 7 segundos después del despegue cuando la pérdida ya no era una preocupación porque ya no hay presión aerodinámica y por tanto la espuma no tiene un impacto crítico', dijo Cain.
Añadió que los funcionarios de la NASA analizaron la filmación del lanzamiento y 'no vimos nada en la región de gran preocupación', pero agregó que 'es extremadamente preliminar' como para descartar daño significativo.
La espuma que se desprende en los despegues ha sido una preocupación seria para la NASA desde que el transbordador Columbia se desintegrara al ingresar a la atmósfera terrestre, muriendo los siete tripulantes, en 2003.
La NASA descubrió que la espuma que se desprendió dañó los azulejos del escudo térmico de la nave, dejándola vulnerable al calor al ingresar a la Tierra.
El lanzamiento de este sábado se realizó sin problemas tras ser postergado durante dos semanas debido a problemas climáticos y técnicos, informó la NASA.
'Lo que vimos hoy fue un lanzamiento majestuoso, sin errores. La nave no ha volado desde 2001 y la preparación para el despegue de hoy no fue sencillo', dijo el administrador de la NASA Michael Griffin