La Ceiba, Honduras.
En un calvario se había convertido tramitar el Registro Tributario Nacional (RTN) en las oficinas regionales del Servicio de Administración de Aduanas (SAR) de La Ceiba debido a que solo se contaba con apenas seis empleados para atender a unos 200 contribuyentes que se presentan a diario.
Muchos usuarios llegaban desde la madrugada a hacer fila para poder ser de los primeros en ser atendidos. Las largas colas se prolongaban hasta una cuadra. “Vine desde las cinco de la mañana a hacer fila para poder salir temprano. No es justo perder casi todo el día aquí solo por un RTN. Me dicen que el problema es que ahí casi no hay trabajadores y solo dejan a uno para el RTN”, manifestó Daniel Villafranca.
“Qué ineficiente es la SAR. La vez pasada llegué desde las siete de la mañana por mi RTN y salí hasta las tres de la tarde. Ojalá que mejore la atención con el nuevo personal que ha llegado”, dijo Edwin Laínez.
Sin embargo, esa odisea terminó. Ayer comenzaron a laborar unas 39 personas más que recién fueron contratadas. “Se nos ha incorporado más personal para atender a los usuarios en los diferentes departamentos, como asistencia al contribuyente, auditorías, análisis de casos y cuenta corriente, para mencionar algunos”, aseguró Roger Marín, director regional del SAR.
El nuevo personal se sometió por dos semanas a intensas capacitaciones en Tegucigalpa para conocer el nuevo sistema tributario.
“Estamos tramitando equipo y mobiliario para trabajar, pero como están centralizadas las compras, estamos esperando todavía que asignen presupuesto para eso”, añadió Marín.
El funcionario recién tomó posesión de la jefatura del SAR, en sustitución de Sara Bustillo, una de seis empleadas que quedó de la antigua Dirección Ejecutiva de Ingresos (DEI).
“Mejorar el servicio a los contribuyentes y contribuir a facilitarles las gestiones para sus obligaciones tributarias son algunas de las expectativas y las instrucciones que trae Marín”, precisó.
Además, pidió paciencia a los contribuyentes, ya que tanto los nuevos trabajadores como él se están adaptando al nuevo Código Tributario, el cual calificó de “más amigable con los ciudadanos”.
Asimismo, dijo que “hay procesos que ya estaban estipulados, como el cierre de algunos negocios y suspensión de los RTN que seguirán su curso por algunos problemas con algunos contribuyentes”.
Con el nuevo sistema tributario se creó también el departamento de auditoría en La Ceiba.
Con esto se busca que la información declarada en un formulario o documento de un comerciante sea verídica. Un equipo de campo se encargará de constatar dicha información proporcionada por el contribuyente.
Satisfechos
El presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Atlántida, Francisco Villatoro, mostró su satisfacción por la llegada de más personal al SAR, ya que había malestar de ciertos comerciantes por el mal servicio que prestaban debido al poco recurso humano con el que se contaba.
“Había una gran fila y también en algunas gestiones los comerciantes tenían que viajar a San Pedro Sula a resolverlas. Qué bueno que ya comenzaron a trabajar más empleados, es una buena noticia. Ya era tiempo que tomaran esa decisión de emplear a más gente porque estaban afectando a los comerciantes”, aseguró el empresario.
Además, las instalaciones necesitan ser dotadas de mobiliario y logística.
En un calvario se había convertido tramitar el Registro Tributario Nacional (RTN) en las oficinas regionales del Servicio de Administración de Aduanas (SAR) de La Ceiba debido a que solo se contaba con apenas seis empleados para atender a unos 200 contribuyentes que se presentan a diario.
Muchos usuarios llegaban desde la madrugada a hacer fila para poder ser de los primeros en ser atendidos. Las largas colas se prolongaban hasta una cuadra. “Vine desde las cinco de la mañana a hacer fila para poder salir temprano. No es justo perder casi todo el día aquí solo por un RTN. Me dicen que el problema es que ahí casi no hay trabajadores y solo dejan a uno para el RTN”, manifestó Daniel Villafranca.
“Qué ineficiente es la SAR. La vez pasada llegué desde las siete de la mañana por mi RTN y salí hasta las tres de la tarde. Ojalá que mejore la atención con el nuevo personal que ha llegado”, dijo Edwin Laínez.
Sin embargo, esa odisea terminó. Ayer comenzaron a laborar unas 39 personas más que recién fueron contratadas. “Se nos ha incorporado más personal para atender a los usuarios en los diferentes departamentos, como asistencia al contribuyente, auditorías, análisis de casos y cuenta corriente, para mencionar algunos”, aseguró Roger Marín, director regional del SAR.
El nuevo personal se sometió por dos semanas a intensas capacitaciones en Tegucigalpa para conocer el nuevo sistema tributario.
“Estamos tramitando equipo y mobiliario para trabajar, pero como están centralizadas las compras, estamos esperando todavía que asignen presupuesto para eso”, añadió Marín.
El funcionario recién tomó posesión de la jefatura del SAR, en sustitución de Sara Bustillo, una de seis empleadas que quedó de la antigua Dirección Ejecutiva de Ingresos (DEI).
“Mejorar el servicio a los contribuyentes y contribuir a facilitarles las gestiones para sus obligaciones tributarias son algunas de las expectativas y las instrucciones que trae Marín”, precisó.
Además, pidió paciencia a los contribuyentes, ya que tanto los nuevos trabajadores como él se están adaptando al nuevo Código Tributario, el cual calificó de “más amigable con los ciudadanos”.
Asimismo, dijo que “hay procesos que ya estaban estipulados, como el cierre de algunos negocios y suspensión de los RTN que seguirán su curso por algunos problemas con algunos contribuyentes”.
Con el nuevo sistema tributario se creó también el departamento de auditoría en La Ceiba.
Con esto se busca que la información declarada en un formulario o documento de un comerciante sea verídica. Un equipo de campo se encargará de constatar dicha información proporcionada por el contribuyente.
Satisfechos
El presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Atlántida, Francisco Villatoro, mostró su satisfacción por la llegada de más personal al SAR, ya que había malestar de ciertos comerciantes por el mal servicio que prestaban debido al poco recurso humano con el que se contaba.
“Había una gran fila y también en algunas gestiones los comerciantes tenían que viajar a San Pedro Sula a resolverlas. Qué bueno que ya comenzaron a trabajar más empleados, es una buena noticia. Ya era tiempo que tomaran esa decisión de emplear a más gente porque estaban afectando a los comerciantes”, aseguró el empresario.
Además, las instalaciones necesitan ser dotadas de mobiliario y logística.
