El príncipe Felipe, heredero de la Corona española, y su esposa Doña Letizia Ortiz bautizaron ayer a su segunda hija, la infanta Sofía, en una ceremonia familiar celebrada en el palacio de la Zarzuela, residencia oficial de la familia real española.
El cardenal arzobispo de Madrid, monseñor Antonio María Rouco Varela, ofició la ceremonia, como ya hiciera con la hermana y primogénita de los príncipes de Asturias, la infanta Leonor, el 14 de enero de 2006. La ceremonia tuvo lugar la tarde de ayer en los jardines del palacio gracias al buen tiempo reinante en la capital de España, y contó con la asistencia de la vicepresidenta primera María Teresa Fernández de la Vega en representación del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, ausente porque realiza una visita oficial a México. La pequeña Sofía de Todos los Santos, nombre que recibió en el bautizo siguiendo la tradición familiar, nació por cesárea el pasado 29 de abril con 3,310 kilos de peso y 50 cm en la exclusiva clínica Ruber.
Un angelito
Durante la ceremonia, la pequeña permaneció tranquila, sin llorar. Su madre, doña Letizia, contó a los periodistas que la infanta Sofía es más despierta que su hermana, tiene más apetito que ella, pesa más, y continúa en periodo de lactancia.
Los padrinos de la infanta Sofía fueron su abuela, Paloma Rocasolano, y Constantino de Bulgaria, príncipe de Vidin, hijo de Simeón de Bulgaria, quien fuera primer ministro de la República, y amigo personal del príncipe Felipe.
Detalles
Protocolo
Respetando la tradición, la Infanta fue bautizada con agua del río Jordán en la pila donde Santo Domingo de Guzmán recibió las aguas bautismales en el siglo XII.
Sucesión
La infanta Sofía es la tercera en la línea de sucesión al trono, por detrás de su padre, el príncipe Felipe, y su hermana, la infanta Leonor.
La familia real española posó ayer para la foto oficial del bautizo de la infanta Sofía.