La Casa de la Cultura de La Ceiba comienza a tomar forma luego que este jueves 31 de julio se firmara la orden de inicio para la restauración del antiguo edificio de La Aduana, en un acto entre la Secretaría de las Culturas, las Artes y los Patrimonios de los Pueblos de Honduras y la constructora Erigo Ingeniería.
Contar con una Casa de la Cultura ha sido un anhelo de los grupos culturales desde hace aproximadamente 30 años. Artistas de distintas disciplinas se quejaban de una “cultura ambulante” ante la falta de un espacio adecuado para la exposición del arte.
La obra tendrá un costo de 29 millones de lempiras, financiados con fondos nacionales. El plazo máximo de entrega es de seis meses, por lo que se prevé su inauguración entre diciembre y enero. La alcaldía de La Ceiba aportará cinco millones de lempiras adicionales para la ejecución de obras complementarias.
Los trabajos comenzarán en dos semanas, según adelantó Mario Guillén, presidente de la empresa Erigo Ingeniería, ganadora de la licitación. “Nuestro compromiso es empezar con el volumen del edificio y poco a poco vamos a ir realizando las obras en el interior conforme a la necesidad del cliente”, apuntó Guillén.
La firma del contrato se realizó durante un evento frente al emblemático edificio, en la primera calle, al que asistieron representantes de grupos culturales y autoridades locales.
“Este espacio se utilizará para mantener vivas todas las expresiones culturales a la cual le apostamos como una gran riqueza de nuestra nación. Además, las casas de la cultura ofrecen talleres de arte, de teatro, de música, de literatura y de pintura”, dijo Anarella Vélez, ministra de la Secretaría de las Culturas, las Artes y los Patrimonios de los Pueblos de Honduras.
“Para el gobierno de la presidenta Xiomara Castro es un honor y una gran oportunidad contribuir a la creación de un espacio al servicio de la cultura”, agregó la funcionaria.
La candidata a la alcaldía de La Ceiba, Alba Zepeda, se comprometió a acondicionar el área exterior del edificio una vez finalizada su restauración. “Vamos a donar el paisajismo y algunas jardinerías”, dijo Zepeda.
Patrimonio
El viejo edificio de La Aduana fue declarado patrimonio histórico de Honduras en abril de 2009 por el Instituto Hondureño de Antropología e Historia (IHAH). La resolución fue publicada en el diario oficial La Gaceta.
En marzo de 2008, el edificio fue entregado a la Sociedad Cultural de La Ceiba (Soclase), una organización conformada por ceibeños amantes de las artes, que se organizaron para exigir apoyo al gobierno y convertir el inmueble en una Casa de la Cultura.
Ese mismo año, se firmó un convenio de cooperación entre el Gobierno, Soclase y la municipalidad de La Ceiba para restaurar el edificio y habilitarlo como casa cultural; sin embargo, no hubo interés por parte de los gobiernos anteriores.
Historia
El edificio de La Aduana comenzó a construirse en 1914 y fue inaugurado en 1917, durante la administración del expresidente Francisco Bertrand. La obra tuvo un costo de 200,000 pesos de la época.
Las autoridades de entonces vieron la necesidad de una oficina para el control de aduanas, ya que por el antiguo muelle de La Ceiba —ubicado donde actualmente está el malecón y muelle turístico— entraban y salían barcos procedentes de varios países, destinados a la exportación de bananos, cervezas y otros productos.
Para construir el edificio, fue necesario derribar un frondoso árbol de ceiba, símbolo que dio nombre a la ciudad y bajo cuya sombra se establecieron los primeros pobladores.
Según relatan fuentes históricas, fueron unas veinte familias de la etnia Pech, procedentes de Dulce Nombre de Culmí, en Olancho, quienes llegaron al lugar entre 1830 y 1835 y se asentaron alrededor del árbol.
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