02/11/2024
08:44 PM

Junta birmana acusa a Suu Kyi de incitar a los damnificados a sublevarse

La junta militar birmana acusó el jueves al partido de la opositora Aung San Suu Kyi de incitar a los supervivientes del ciclón Nargis a sublevarse, al tiempo que permitía el acceso de cooperantes extranjeros a una región devastada y promulgaba la nueva Constitución.

    La junta militar birmana acusó el jueves al partido de la opositora Aung San Suu Kyi de incitar a los supervivientes del ciclón Nargis a sublevarse, al tiempo que permitía el acceso de cooperantes extranjeros a una región devastada y promulgaba la nueva Constitución.

    Un comunicado del jefe de la junta militar, Than Shwe, leído por la televisión estatal, proclamó la aprobación y entrada en vigor de la nueva Constitución tras el referéndum de mayo. Se trata de un anuncio repentino ya que Birmania había anunciado que la Constitución entraría en vigor al cabo de dos años, tras la organización de elecciones legislativas.

    Según el comunicado, el 92,48% de los votantes aprobó el proyecto de Constitución, con una participación del 98,12%. La oposición califica esta Constitución de 'antidemocrática', por considerar que aspira a legitimar la supremacía del Ejército, en el poder desde 1962.

    Las autoridades birmanas mantuvieron el referéndum pese a los llamamientos internacionales pidiendo su postergación por el paso del ciclón Nargis. Casi cuatro semanas después del paso del tifón, que oficialmente dejó más de 133.600 muertos y desaparecidos, la mayoría de los 2,4 millones de damnificados no recibió, según la ONU, ninguna ayuda internacional. La junta había impedido durante mucho tiempo el acceso de los socorristas extranjeros a la zona.

    En un virulento editorial, el diario oficial New Light of Myanmar acusó a la Liga Nacional por la Democracia, LND, el partido de Suu Kyi, de intentar 'aprovechar la situación políticamente en lugar de cooperar con la población'.

    'La LND intenta atizar el descontento de las víctimas y los problemas, para que la ira de la opinión pública degenere en disturbios', añadió. Este nuevo ataque contra los partidarios de Suu Kyi tiene lugar dos días después de que las autoridades prolongasen un año más la orden de arresto domiciliario que pesa desde 2003 sobre la líder opositora y premio Nobel de la Paz.

    El diario también calificó de 'absolutamente inaceptables' las informaciones publicadas por la prensa extranjera sobre los esfuerzos de las autoridades locales por impedir que los birmanos ayuden a los damnificados.

    Asimismo afirma que entre los miles de sobrevivientes que se agolpan en las carreteras puede haber 'oportunistas'.'Nadie puede saber exactamente de dónde vienen aquellos que esperan a los vehículos en la carretera, ni quiénes son', indicó, estimando que mendigar ayuda 'puede dañar la imagen de la nación'.

    Varios voluntarios procedentes de las regiones devastadas afirmaron que innumerables restos de cadáveres continúan descomponiéndose en los arrozales.'El depósito de agua de mi aldea estaba todavía lleno de cadáveres en descomposición y no podía utilizarse', relata Myo Thant.

    Tras rechazar ayuda extranjera, la junta birmana empezó a abrir el delta del Irrawaddy, la zona más golpeada por el ciclón de principios de mayo a los cooperantes internacionales a raíz de una visita, la semana pasada, del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.

    Según Richard Horsey, portavoz de Naciones Unidas en Bangkok, todo el personal de la ONU puede viajar a la zona devastada con un preaviso de 48 horas. Sin embargo la Federación Internacional de la Cruz roja seguía a la espera de un permiso para enviar a 30 cooperantes que se encuentran en Rangún.

    La junta sigue negándose a que la ayuda llegue en navíos militares extranjeros. La carga del buque militar francés 'Mistral' destinada a Birmania, será descargada en Tailandia.