Isabel Zambrano, un nuevo talento periodístico en el área del deporte, se ha convertido en una de las presentadoras más admiradas por el público masculino.
Se caracteriza por ser una joven muy luchadora y disciplinada en lo que se propone. Una de sus grandes pasiones es el deporte, es una atleta físicoculturista, dedica muchas horas al gimnasio porque ella considera ser un ejemplo para las personas que deseen verse y sentirse bien. Una joven humilde, simpática y muy entusiasta, así es Isabel, uno de los rostros más bellos en la televisión.
Siempre me gustó el área deportiva. Desde pequeña admiré a Salvador (Nasralla). Luego Mauricio Kawas me dio la oportunidad de trabajar para ellos, y finalmente Rafa Villeda y René Mendoza confiaron en mí para trabajar en Deportes TVC. La farándula no es lo mío, no soy de andar vistiendo finísima y todo eso; con decirle que hasta pena me da cuando alguien me pide una foto en la calle.
Sí. En noticias generales, pero no presentando. Me gustaría el trabajo de campo, reportera, me gusta el trabajo fuerte.
Su dentadura, luego uno se lleva unas sorpresas (risas). Creo que eso es muy importante en toda persona, sea hombre o mujer.
Sí, me realicé una operación de implante de senos, pero estoy en proceso ya de quitármelos.
Pues trabajo todo el cuerpo por igual para que se me vea uniforme.
Sí, por supuesto. Yo considero que todas las mujeres debemos sentirnos sexis y ser valoradas no solo por lo sexi, sino también por nuestra inteligencia.
No. Ese rumor empezó porque con la hermana de él somos buenas amigas. Y con él solo tenemos una amistad, nada más.
(Risas) Pues le diré que no lo sabía. Yo trato de motivar a la gente a cuidarse, a entrenar, ya que en Honduras no se practica mucho el deporte. Soy una atleta, y por lo mismo trato de dar el ejemplo de vida saludable.
Así como me ven en la televisión, así soy en todas partes, así deberían ser todas las personas.
(Risas ) Ellos me cuidan y me aconsejan en todo. Siempre me he dado a respetar y creo este es el principal motivo por el que me tienen mucho respeto; y sí, hay bromas, pero hasta cierto punto.
Son tantas cosas que, más que ofenderme, de alguna manera me halagan, si no se pasan, claro está. He notado que la mayoría me llama la “Diosa del Fitness” (risas).
Por ahora no, pero estoy tratando a alguien. No sé qué pasará más adelante.
No lo creo y no tendrían por qué, ya que todas las mujeres somos iguales, lo único es que si queremos vernos bien, debemos esforzarnos. Hablo con muchas mujeres que me piden consejos para mejorar su cuerpo.
(Risas) Me robé una bolsa de pan de una pulpería, vivía sola en Tegucigalpa y no tenía dinero, cómo olvidar eso. Con el tiempo regresé y le comenté a la señora, muy amablemente me dijo: “Hija, que Dios te bendiga”.
Nadie. Siempre reviso páginas de presentadoras deportivas y ahí saco algunos atuendos, y como no tengo compañeras de trabajo, se imaginará, es difícil. Ellos dicen que con todo me miro bien. (Risas)
Buzo y camisa, es supercómodo dormir así.
Ufffff!!! Zlatan, me encanta su estilo de juego y sus goles combinados con artes marciales.
Acá en Honduras, lo agrandados y habladores que son, ¡Ojo! No todos. No pueden decir “hola”, porque ya cuentan que se acostaron con uno y no me parece correcto. Pero claro, uno de mujer también debe darse a respetar.
Que yo recuerde, no, y espero no serlo nunca.
Jamás. Soy atleta de físicoculturismo donde se muestra el cuerpo, pero como arte y con profesionalismo, no como actriz porno.