El dirigente de la Unión Cívica Democrática (UCD), Jimmy Dacaret, expresó que se intenta instaurar una “dictadura constitucional” con la remoción de jefes de instituciones que luchan contra la criminalidad.
“Aquí hay una jugada política en convertir a Honduras en una dictadura constitucional. Esta vez una organización de sociedad civil prácticamente se ha prestado hasta cierto juego”, expresó. El Gobierno logró apoyo de una parte de la sociedad civil para defenestrar a estos funcionarios al aprobar la reelección del cargo de rector de la Unah, a fin de que la titular de esa entidad sea nombrada un período más en el cargo.
“Como dicen, favor con favor se paga, la reelección de la rectora sencillamente trae el beneficio para prestarse para pedir la cabeza de todos estos porque si es por incapacidad y por ineficiencia, hasta el mismo Presidente de la República tendría más o menos los mismos datos de ineficiencia”, insistió Dacarett. Coincidió con la opinión de otras personalidades en el sentido que el presidente del Congreso pretende nombrar funcionarios leales en estas entidades. Es así que las instituciones ligadas al sector justicia se han debilitado sustancialmente en detrimento de la lucha contra la criminalidad, valoró el empresario.
“Se nos informa que el fiscal general se va, ¿por qué?, porque lo necesitan para poder manejar la impunidad y el control, la institucionalidad la tienen quebrada, ya no tenemos Corte Suprema de Justicia independiente.
“Se nos informó ayer en la noche (domingo) que posiblemente hoy (ayer) también se tome la decisión del comisionado de Derechos Humanos porque ha sido una voz incontrolable por el poder”.
El empresario exigió que el Congreso Nacional no puede continuar destituyendo y debilitando la institucionalidad.
“El presidente del Congreso Nacional y el Congreso Nacional, igualmente tendrían los mismos datos de ineficiencia porque es el Estado en general el incapaz de darnos los resultados que buscamos”, remarcó.
