San Pedro Sula, Honduras.
El Instituto Hondureño para la Prevención del Alcoholismo, Drogadicción y Farmacodependencia (Ihadfa) está reforzando sus atenciones en la Capital Industrial, creando programas de atención integral y saliendo a las comunidades más vulnerables para hacer trabajos de prevención en los jóvenes con el apoyo de la Asociación de Pastores.
“El Centro de Atención Integral en San Pedro Sula tiene capacidad para dar atención ambulatoria a 60 personas por día, no obstante, pocos conocen de este servicio y solo estamos recibiendo un 40% de ese número de pacientes”, expresó Óscar Gómez, director nacional.
El objetivo es ir más allá de un servicio de tratamiento y rehabilitación, lo que se busca es apoyar y reforzar la prevención a través de educación en las escuelas, colegios y universidades.
Gómez añadió que el mayor consumo de los hondureños es de alcohol, seguido del tabaco, marihuana y cocaína, en ese orden y en cuarto lugar sustancias químicas.
Eva Espinal, especialista en desintoxicación, manifestó que en la institución existe una preocupación porque cada día son más los menores entre los nueve y 15 años que están teniendo contacto con drogas legales e ilegales.
“Se tiene que trabajar mucho en la adicción, tráfico y venta de drogas a la que están expuestos los menores, el acceso a las drogas es muy fácil, incluso en los centros educativos y eso contribuye a que la situación se complique”, indicó.
En el Centro de Atención Integral atienden jóvenes a partir de los 15 años.
El Instituto Hondureño para la Prevención del Alcoholismo, Drogadicción y Farmacodependencia (Ihadfa) está reforzando sus atenciones en la Capital Industrial, creando programas de atención integral y saliendo a las comunidades más vulnerables para hacer trabajos de prevención en los jóvenes con el apoyo de la Asociación de Pastores.
“El Centro de Atención Integral en San Pedro Sula tiene capacidad para dar atención ambulatoria a 60 personas por día, no obstante, pocos conocen de este servicio y solo estamos recibiendo un 40% de ese número de pacientes”, expresó Óscar Gómez, director nacional.
El objetivo es ir más allá de un servicio de tratamiento y rehabilitación, lo que se busca es apoyar y reforzar la prevención a través de educación en las escuelas, colegios y universidades.
Gómez añadió que el mayor consumo de los hondureños es de alcohol, seguido del tabaco, marihuana y cocaína, en ese orden y en cuarto lugar sustancias químicas.
Eva Espinal, especialista en desintoxicación, manifestó que en la institución existe una preocupación porque cada día son más los menores entre los nueve y 15 años que están teniendo contacto con drogas legales e ilegales.
“Se tiene que trabajar mucho en la adicción, tráfico y venta de drogas a la que están expuestos los menores, el acceso a las drogas es muy fácil, incluso en los centros educativos y eso contribuye a que la situación se complique”, indicó.
En el Centro de Atención Integral atienden jóvenes a partir de los 15 años.
