El cardenal Óscar Andrés Rodríguez abogó en la víspera de la Navidad y el Año Nuevo para que cese la violencia en el país, que a diario registra una veintena de muertes.
“Esperemos que la violencia, esta criminalidad e inseguridad en la que estamos sumergidos los hondureños, cese.
El tiempo de adviento es para reflexionar en nuestras acciones y tener paz en nuestro corazón”, expresó el líder del catolicismo en Honduras, en la homilía de la misa dominical oficiada en la catedral de Tegucigalpa.
El religioso manifestó su deseo de que en la temporada de Navidad y Año Nuevo, tiempo de celebración por el nacimiento de Jesucristo, no se reporten ningún crimen, ningún atentado, ninguna muerte violenta.
Violencia
El prelado condenó la violencia que impera en Honduras, uno de los países con índices más altos en materia de homicidios del mundo, con 92 por cada 100,000 habitantes en 2011, según un reciente informe de las Naciones Unidas.
Las cifras de homicidios revelan que los departamentos más violentos de Honduras son Olancho, Cortés, Francisco Morazán y Yoro.
Más de siete mil personas pierden la vida violentamente en Honduras, lo que representa un deceso cada 78 minutos, según datos oficiales del Conadeh (Comisionado Nacional de los Derechos Humanos). El 95% de los crímenes son ejecutados con armas de fuego.
“Queremos vivir estos días sin ningún crimen, sin ningún atentado, sin ninguna muerte violenta, podemos llegar a hacerlo teniendo a Dios en nuestro corazón”, señaló Rodríguez, quien también es arzobispo de Tegucigalpa.
Subrayó que en “Honduras no hay paz, no hay paz social, no hay respeto a la vida, la Navidad nos sacude para que podamos llevar el mensaje a aquellos que no creen en Dios, sino que creen en la pistola, la metralleta, las balas, en el robo o el crimen”.
“Nadie puede buscar soluciones a los problemas encerrándose en sí mismo, cada uno de nosotros estamos llamados a ser testigos de paz”, agregó.
“Honduras vive tiempos difíciles, pero solo podremos salir si pensamos en el bien común, si pensamos en el bien de nuestro país y no en intereses particulares”.
La Navidad, según Rodríguez, es tiempo para “reflexionar en nuestras acciones y tener paz en nuestro corazón”.
Ambiente
A pesar de la crisis económica, en las principales ciudades del país son visibles los nacimientos y otros motivos navideños. Los comercios promueven ofertas en ropa, calzado y perfumes, entre otros productos.
En Tegucigalpa, los centros comerciales, bancos y supermercados lucen abarrotados desde la semana pasada. El Gobierno decretó hoy día de asueto para los funcionarios gubernamentales, que desde el sábado comenzaron a viajar a diferentes comunidades del interior del país para pasar las fiestas de Navidad con sus familiares.
La misma disposición regirá para el 31 de diciembre, según un comunicado de la Secretaría del Interior.
Lobo pasará la Navidad en su residencia particular cercana a Tegucigalpa.
Muchos hondureños disfutarán de las fiestas de Navidad y Año Nuevo en el exterior; otros que residen en Estados Unidos han venido al país para estar con sus familiares.
Este 25 de diciembre, las misas de la catedral de San Pedro Sula se celebrarán a las 9:00 am, 11:00 am y 6:00 pm, esta última será oficiada por el obispo sampedrano monseñor Ángel Garachana.
