Este miércoles se cumplió el ultimátum de 24 horas que el Sindicato de Trabajadores de la Empresa Agrícola Santa Inés (Sitraeasisa) le dio al gobierno de la presidenta Xiomara Castro para desalojar tres fincas de banano invadidas en aldea Isletas, Sonaguera, Colón.
Debido a que ninguna autoridad gubernamental se pronunció al respecto, este jueves la carretera CA-13 estará tomada a la altura de Planes en Sonaguera, Colón, por trabajadores de la Empresa Agrícola Santa Inés, propietaria de las tierras, quienes están a punto de perder sus trabajos.
“Parece que el Gobierno si no es así no hace caso, son once días que tienen invadidas las fincas y que nuestros afiliados no están trabajando. El Gobierno no le ha dado importancia a lo que está pasando”, lamentó Alirio Garay, presidente de Sitraeasisa.
“Por eso mañana (jueves) nos tomaremos la carretera CA-13, no nos gusta hacer estas cosas, pero tenemos que defender las fincas que nos han tomado y la estabilidad laboral de los compañeros”, agregó Garay. Las fincas invadidas por grupos campesinos son Guanacaste, La Paz y La Esperanza, sumando unas mil hectáreas sembradas con plantación de bananos en producción.
“El comercio se ve afectado con estas tomas, no nos llegan productos y tampoco salen lo que se produce acá. Es un caos cuando se toman la carretera porque deja pérdidas”, lamentó Egla Sosa, presidenta de la Cámara de Comercio de Tocoa.
Crisis
Este conflicto agrario mantiene en zozobra a unos mil empleados que laboran en la empresa agrícola Santa Inés, ya que está a punto de perder su trabajos por las invasiones.
Las invasiones de las fincas están provocando numerosas pérdidas a la bananera la cual produce entre 12 a 15 contenedores de bananos diario que son exportados a Estados Unidos, a un precio de 12,000 a 13,000 dólares cada uno (unos 300,000 lempiras), que no está generando.